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Alarte: "El ciego es Font de Mora"

El ministro dice que 14 autonomías tienen "una teoría distinta de la miopía"

La sociedad valenciana, partidos políticos, asociaciones de padres y alumnos, sindicatos y el Ministerio de Educación salieron ayer en tromba contra las polémicas declaraciones del consejero de Educación, Alejandro Font de Mora, que acusa a Zapatero de "provocar la miopización de muchos niños" por repartir ordenadores de 10 pulgadas. El secretario general del PSPV-PSOE, Jorge Alarte, afirmó que simplemente "el ciego y sordo político" es Font de Mora por rechazar los 11,2 millones del Gobierno para implantar el programa Escuela 2.0 en todas las aulas de 5º de Primaria.

El ministro de Educación, Ángel Gabilondo, destacó ayer en Toledo -precisamente durante la firma del convenio Escuela 2.0 con el ejecutivo de Castilla-La Mancha- que hay 14 comunidades autónomas que van a cofinanciar el plan que "deben de tener una teoría distinta sobre la miopía".

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El ministro, poco dado a entrar en polémicas, afirmó que respeta "las teorías de miopía de cada cual", pero se lamentó "por los estudiantes y profesores de la Comunidad Valenciana" porque "esta autonomía tenía más de 11 millones para implantar este programa y podía haberlos puesto en valor". Gabilondo recordó: "Ni el ministerio distribuye los ordenadores, ni Zapatero tampoco, por si alguno piensa que vamos con un carromato por los institutos".

"No logro explicarme cómo el consejero de Educación ha llegado a esta conclusión", reflexionó el delegado del Gobierno, Ricardo Peralta, en una reunión con empresarios de la construcción. "Una política inteligente del Gobierno español produce ceguera en determinados políticos", se respondió Peralta. Más lejos fue la responsable socialista de Alicante, Ana Barceló, que pidió directamente su "dimisión". Los jóvenes de su partido consideran que Font de Mora vive en "el medievalismo tecnológico", razón por la cual se deberían prohibir la Nintendo y el iPhone.

Desde Esquerra Unida, Marga Sanz afirmó que "el PP valenciano se ha especializado en perder dinero del Gobierno central, como pasó con el Plan Educa 3", en su "estrategia de victimismo" con Zapatero. Una estrategia que ayer reprodujo fielmente la portavoz de Educación del PP en las Cortes, Maria Barrieras, con el insistente argumento de que "es indignante que el Ejecutivo de Zapatero haya dejado a los valencianos fuera del proyecto Escuela 2.0".

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