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Crítica:POP
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Bienvenida sólida

Demostrando que no siempre lo más aparentemente comercial ha de casar con el beneplácito popular, la fiesta de bienvenida organizada con motivo de la celebración de la 33ª Copa América reunió a cerca de 5.000 personas en un abarrotado Tinglado 2 del Puerto. La matización no es gratuita porque, hace sólo un par de años, el concierto de libre acceso que los malagueños El Efecto Mariposa ofrecieron en la Marina Real con ocasión de la anterior edición apenas congregó a varios centenares, en una noche de lo más desangelada. Nada que ver con la exitosa apuesta del viernes noche, protagonizada por tres bandas punteras y consolidadas dentro del panorama estatal menos acomodaticio, en un cartel que aunaba calidad y un poderoso reclamo para el público, pese a que su composición apenas hubiera sido desvelada con tres días de antelación.

AMERICA'S CUP WELCOME PARTY

Los Planetas, Nacho Vegas y La Habitación Roja. Viernes 5 de febrero de 2010. Tinglado 2 del Puerto de Valencia.

Los valencianos La Habitación Roja saben como muy pocos lo difícil (por no decir imposible) que es ser profeta en su propia tierra, y es por ello que tuvieron la poco agradecida misión de abrir fuego en un recinto que comenzaba a llenarse. Mejores ocasiones habrá de testar cómo resultan en directo las canciones de su inminente Universal, su disco de emancipación de Steve Albini y de vuelta a su sonoridad de antaño, del que, aun así, avanzaron ya algunos temas. El creciente murmullo ambiental no fue óbice para que Nacho Vegas fuera foco de todas las miradas con su clase y sobriedad habituales, aunque más de uno echase en falta mayor empaque instrumental en una banda algo menguada en efectivos, en la que los teclados de Abraham Boba son ya santo y seña. Remató su set con la infalible El hombre que casi conoció a Michi Panero. El relevo, encarnado en Los Planetas, sirvió para comprobar que los granadinos llevan repitiendo el mismo concierto (con la salvedad de la recuperación de Mil millones de veces) desde antes del pasado verano, en un vigoroso balance entre sus distintas vetas sonoras, que el viernes noche (antes de que la reivindicación del Cabanyal hiciese acto de presencia sobre el escenario en forma de pancarta) sonó particularmente diáfano. A su líder, J, que saludó irónicamente a "tantos aficionados a la náutica deportiva", se le pudo ver más tarde departiendo amistosamente en la barra del local cercano donde se celebró la post party, mientras el bajista de La Habitación Roja oficiaba de disc jockey.

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