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Blanco seduce al sector más crítico del PP con Zapatero y a los empresarios

AVE insta a la Generalitat y al resto de ministerios a seguir su ejemplo

El ministro de Fomento, José Blanco, salió ayer por la puerta grande en su visita a Valencia, donde tuvo una apretada agenda en la que no escatimó protagonismos al Consell ni al Ayuntamiento. Primero compartió el primer recorrido del AVE en la Comunidad Valenciana con el consejero de Infraestructuras y Transportes, Mario Flores, transmitiendo una inequívoca sensación de acuerdo y cooperación entre ambas administraciones, muy inversa a la fricción ininterrumpida que el Consell mantiene con el Gobierno central.

Después envolvió a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, en esa misma atmósfera de consenso y diálogo, en una reunión en la que la munícipe le expuso un amplio espectro de reivindicaciones en el que no faltaron el puerto y el aeropuerto. Barberá expresó satisfacción y tuvo palabras de reconocimiento para el ministro, que, siguiendo el trazado que inició con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y con el presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha imprimido nuevas y fluidas maneras a las relaciones que su departamento, con otros responsables, mantenía con las demás administraciones.

El último punto de la agenda de Blanco fue comer con el pleno de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), el selecto lobby que aglutina a los principales patronos de la Comunidad Valenciana, con el que mantiene un excelente vínculo desde antes de formar parte del Gobierno. En ese sentido, el motivo principal de la visita del ministro fue la invitación de AVE.

El presidente de AVE, Francisco Pons, valoró el esfuerzo que el Ministerio de Fomento está haciendo con las infraestructuras en la Comunidad Valenciana y ponderó las buenas relaciones entre el ministro y la Generalitat. Blanco hizo también un hueco para reunirse con la Ejecutiva de Jorge Alarte.

En medio de esa unanimidad, la visita de Blanco sólo tuvo una nota discordante. Fue la que emitió el secretario general del PP valenciano, Ricardo Costa, quien se preguntó si un "sustituto devaluado" de José Luis Rodríguez Zapatero vino "a plantear propuestas como ministro de Fomento y soluciones" o si, por el contrario, vino "a demostrar que es el número dos del PSOE".

En esta nueva etapa de colaboración, el ministro José Blanco sacó además pecho por el esfuerzo inversor que su departamento ha hecho en la línea de alta velocidad. El Gobierno ha gastado más de 5.800 millones de euros hasta la fecha y entre 2009 y 2010 gastará otros 4.355 millones. En este sentido, Blanco anunció ayer la licitación antes del verano de 2010 de la primera fase del eje pasante -por el que el AVE atravesará Valencia para luego seguir hasta Castellón- y de la Estació Central, del arquitecto César Portela. Estas son dos de las infraestructuras de envergadura del AVE que están pendientes. La estación provisional, en obras, estará lista en mayo y las pruebas se harán a partir de septiembre.

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"A finales de 2010, la alta velocidad llegará a Valencia", reiteró Blanco, para comprometerse a que el AVE arribe a Alicante en 2012 y la línea hasta Castellón esté toda en obras el año próximo.

Considerado uno de los ministro más políticos del Ejecutivo de Zapatero, Blanco está dispuesto a rentabilizar el esfuerzo en el proyecto pero, ante todo, quiere cerrar la boca a los políticos que aún cuestionan el respaldo de Fomento a este proyecto. Por eso, ayer, dejó unas horas su despacho en Madrid para recorrer en un tren laboratorio de Adif a diésel el paso más largo de la línea, el túnel de la Cabrera, con más de siete kilómetros de longitud y donde se han conseguido siete récords mundiales seguidos de excavación con tuneladora. Y también comentar sin sonrojo que el de ayer fue el primer viaje sobre la línea.

El trayecto Madrid-Valencia -al que le restan por instalar 40 kilómetros de vía- se cubrirá en una hora y 35 minutos, aunque tras un periodo de rodaje se espera recortar el tiempo de trayecto entre cinco y siete minutos. La línea, que estará en pruebas de uno a tres meses, se abrirá al público a finales de 2010.

Pero Blanco, flanqueado toda la visita por el consejero de Infraestructuras, Mario Flores, vio también en su paso por Valencia una oportunidad para firmar la pax romana con la alcaldesa, Rita Barberá. Las relaciones entre las dos administraciones en estos años pasados han sido más que tensas.

Este nuevo clima de entendimiento llevó a Blanco hasta el Consistorio que dirige Barberá, con la que habló de proyectos prioritarios. El más importante es el soterramiento de un tramo de vías en Serrería, en la zona sur. Blanco planteó a la alcaldesa -y a ésta le pareció una idea razonable- incluir esta obra, así como el túnel pasante, en el estudio técnico que el ministerio ha encargado del corredor mediterráneo y que estará listo con su correspondiente memoria financiera en marzo de 2010. Este eje recorrerá Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana y Cataluña y todas las autonomías serán corresponsables, con Fomento, de su financiación. Incluso el sector privado.

La alcaldesa no desperdició la oportunidad para reclamar mejoras en los accesos congestionados a la ciudad. El ministro puso fecha a la ampliación del puente de Xirivella -la salida hacia Madrid-. Se licitará el 19 de septiembre. También se comprometió a mejorar el polémico paso inferior de la V-21 y la ampliación de la V-30 por el sur. Del acceso norte al puerto de Valencia, Flores dijo que debe pagarlo Fomento. De este proyecto y de otros hablarán ministerio y Generalitat en una reunión el 15 de septiembre. El secretario de Estado, Víctor Morlán, y la secretaria general del ministerio, Inmaculada Rodríguez-Piñero, serán sus interlocutores.

La cogestión comercial de los aeropuertos de Manises y L'Altet se concretará en un comité de rutas más adelante. Valencia acogerá a finales de 2010 un congreso mundial sobre infraestructuras de transporte sostenibles.

Una nueva mirada para los desafíos

La armonía entre la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) y el ministro de Fomento, José Blanco, no fue óbice para que su presidente, Francisco Pons, plantease inquietudes respecto al futuro de las infraestructuras. Pons alabó el impulso que Blanco ha dado al AVE, pero le pidió que anticipara su llegada a Valencia y Alicante a mediados de 2010.

También le solicitó la inclusión del corredor mediterráneo como eje prioritario de la red ferroviaria transeuropea, y que espolease las infraestructuras que lo vinculan a los puertos y núcleos logísticos

. Tampoco se le quedaron en el tintero las infraestructuras para potenciar la conectividad aérea ni los planes de carreteras.

Blanco renunció al discurso que llevaba preparado y entró al trapo con la misma familiaridad. Planteó que en el contexto de crisis, con un modelo de crecimiento "con mucho colesterol" y sin fluidez crediticia, era necesario "responder a los desafíos con una mirada distinta". Blanco defendió la importancia de la inversión pública y subrayó la incongruencia de reclamar actuaciones y, a la vez, plantear el recorte del gasto público como receta contra la crisis.

El ministro mandó otro recado a los empresarios cuando apostó por movilizar un importante volumen de recursos públicos con una iniciativa de colaboración público-privada para impulsar las infraestructuras. De esas fórmulas de financiación dependerá el empuje del corredor mediterráneo, que consideró prioritario. Lo demás, llegar tres meses antes o después, cuando se trata de una infraestructura que va a durar muchos años y tiene que cumplir con todas las normas de seguridad, le pareció que no era para ponerse a discutir.

Compromisos

- AVE: Fomento licitará antes del verano de 2010 la Estació Central y el eje pasante del AVE. Entre 2009 y 2010, ministerio y empresas públicas invertirán 4.335 millones en la alta velocidad.

- Corredor Mediterráneo: El soterramiento de las vías en Serrería se incluirá en un estudio técnico del corredor mediterráneo en 2010.

- Accesos a Valencia: El 19 de septiembre se licitará la ampliación del puente de Xirivella. El acceso norte se incluirá en el nuevo protocolo de carreteras.

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