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La CAM diseña un plan de ahorro para seguir sola a corto plazo

La propuesta incluiría recortes de un millar de empleos y cierre de oficinas

Caja Mediterráneo (CAM) presenta hoy al Banco de España un plan de recapitalización individual con el que seguir en solitario a corto plazo. El plan, que reclama el regulador tras conceder a la entidad alicantina los 2.800 millones que solicitó al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y diseñado a partir de la decisión de la caja de traspasar su negocio a un banco, contempla medidas de reestructuración operativa y de ahorro de gastos. Con las medidas de recorte la entidad pretende ahorrar 600 millones hasta 2015 (a razón de 120 millones al año), con un ajuste de empleo que durante los próximos años podría afectar a alrededor de un millar de trabajadores entre prejubilaciones (cerca de 900) y bajas incentivadas, según fuentes sindicales. También implicará continuar con el plan para racionalizar oficinas.

El plan no excluye que a medio plazo se salga a Bolsa o se encuentre un socio

El recorte de empleos, agregan las mismas fuentes, es el que estaba previsto cuando la CAM tenía un pacto con Cajastur, Caja Cantabria y Caja Extremadura. Rota la fusión fría, la caja alicantina quiere que la autoridad laboral apruebe el recorte pese a ser consciente de que las últimas reformas del Gobierno (por ejemplo sobre la edad de jubilación) cambian el escenario. Y el plan de racionalización de oficinas es el iniciado en el año 2008. Este plan ha supuesto ya el cierre de alrededor de 200 oficinas en toda España, con lo cual el grueso de la reestructuración estaría ya hecho. Fuentes sindicales apuntan a que podrían quedar un centenar de cierres por concretar. La CAM cuenta con unas 960 sucursales.

La directora general de la CAM, María Dolores Amorós, presentó ayer el plan y el consejo de administración dio su visto bueno. Con este plan se funcionará a corto plazo aunque a medio plazo se pueda optar por salir a Bolsa, por devolverle al FROB, cuya presencia es temporal, lo prestado o por la entrada de un nuevo socio, según puntualizaron ayer fuentes del consejo de administración.

La caja subrayó que buena parte de las medidas incluidas en el plan de recapitalización ya han comenzado a ser puestas en marcha, como es el caso de la racionalización de oficinas e incluso del nuevo organigrama que la caja anunció hace un par de semanas y que le ha llevado a eliminar jefaturas y numerosas direcciones generales.

El nuevo organigrama de la CAM, que preside Modesto Crespo, sitúa dependientes de Amorós a la dirección de Desarrollo Corporativo (al frente de la cual se sitúa a José Pina, que vuelve tras fracasar la fusión fría), la dirección de Gestión Financiera y Participaciones, la de Administración y Control, la de Recursos Humanos y la de Medios. El nuevo mapa de la caja también sitúa dependiente del director general adjunto, Agustín Llorca, a las direcciones territoriales, la dirección de Negocio, la de Riesgo Crediticio y Dirección de Recuperación y la secretaría general.

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La CAM asegura que su política de provisiones y el FROB le garantizarán un capital principal del 10,3% y del 12,3% en términos de solvencia. Amorós destacó que "los mayores niveles de solvencia y eficiencia, junto con la recuperación paulatina del margen financiero, mejorarán la rentabilidad de la entidad, que se situará en niveles de ROE (rentabilidad) superiores al 15% al final del año 2015".

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