Comerciantes y vecinos piden a Barberá que dé licencias en El Cabanyal

Respetar la orden del Gobierno de paralizar el plan de El Cabanyal para evitar un expolio al patrimonio no exige detener toda actividad en el barrio. Así lo defendieron ayer los vecinos y comerciantes de El Cabanyal, que se unieron para instar al Ayuntamiento de Valencia a que levante el bloqueo a la concesión de licencias en el barrio y permita "recuperar un escenario de normalidad" que ayude a "la reactivación social y económica del barrio".

En un comunicado conjunto, destacaron un reciente informe de la Abogacía del Estado que aclara que la suspensión del proyecto de prolongar la avenida de Blasco Ibáñez "no implica la necesaria e indiscriminada denegación" de permisos, ya que la orden del Gobierno pretende proteger el patrimonio hasta que el Tribunal Constitucional decida sobre el conflicto urbanístico, y no paralizar el desarrollo de la zona.

El Gobierno de Rita Barberá, sin embargo, reiteró ayer mismo su rechazo a conceder licencias de cualquier tipo en El Cabanyal hasta que el Gobierno central "rectifique" la orden de suspensión del plan, que implica la destrucción de más de 450 casas y parte el barrio en dos. El concejal de Urbanismo, Jorge Bellver, se encargó en el pleno municipal de reiterar la negativa rotunda a dar permisos para abrir negocios, pintar fachadas o rehabilitar viviendas en el conjunto histórico aunque no afecten a valores históricos y artísticos.

Jarro de agua fría

El equipo de gobierno del PP respondió así a una moción presentada por el Grupo Socialista, pero indirectamente echó también un jarro de agua fría sobre la petición surgida en el propio barrio.

La asociación de vecinos de El Cabanyal-Canyamelar ha reclamado varias veces al Ayuntamiento que cambie de actitud y deje de "echar la culpa" de la suspensión de licencias a la orden del Gobierno de revisar el plan urbanístico.

Por su parte, la Asociación de Comerciantes, Industriales y Profesionales del Marítim (Acipmar), con 140 asociados, ha remitido cartas sin respuesta al Ayuntamiento y al Ministerio de Cultura para que aclararan el alcance de la paralización del plan. Tras conocer el informe de la Abogacía del Estado, que encargó el Ministerio de Cultura para despejar las dudas, Acipmar y vecinos han hecho causa común en su exigencia de que se desbloqueen las licencias. "No vamos contra el Ayuntamiento, sino contra la inacción. Queremos que cumpla con sus competencias", afirman en Acipmar.