Denuncia ecologista por el vertido de una depuradora en Altea
Con el impactante nombre de La cascada de la mierda, Ecologistas en Acción denunció ayer los vertidos de la depuradora de Serra Gelada, en una playa de L'Alfàs del Pi próxima a Benidorm, donde desemboca el emisario. "Aquí el agua contiene 20 veces más de contaminación de la permitida", según aseveró Jorge Sáez, portavoz del colectivo, que mostró los resultados de un estudio analítico realizado el 17 de julio pasado que corroboran estos datos de contaminación.
Por todo ello, la asociación conservacionista exige que se ejecute el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) y la Ley de Costas en cuanto a los vertidos al mar y la gestión del dominio público terrestre. La normativa, según Ecologistas en Acción, aprobada en 2005 para Serra Gelada confirma que "hay que eliminar los vertidos en seis meses, y en cinco años no se ha hecho nada". La Ley de Costas también imposibilita los vertidos al mar en esta zona, ya que fija 500 metros de distancia mínima de los emisarios submarinos respecto a la costa, prohíbe verter sustancias peligrosas y obliga a que todos los puntos de vertido proporcionen datos sobre los volúmenes registrados, cánones y acciones para reducir la contaminación.
Los ecologistas presentaron ayer la campaña en el Club Náutico de Altea, donde realizaron un "cierre virtual" de la playa debido a la contaminación y colocaron un gran cartel en el que se podía leer Playa tóxica.
A bordo del velero Diosa Mat, los ecologistas están recorriendo la costa valenciana informando a los usuarios del riesgo para la salud supone estos índices de contaminación procedente de estos vertidos ilegales de aguas residuales que afectan al parte natural de la Serra Gelada.
Esta actividad de Ecologistas en Acción se enmarca dentro del informe Banderas Negras en el País Valencià en el que el grupo conservacionista ha delimitado las zonas con mayores problemas de vertidos tóxicos.
