Detectados 25 'sin papeles' en la vendimia de uva de mesa

Malestar, preocupación y desánimo. La vendimia de la uva de mesa del Vinalopó Mitjà ha tropezado con la Inspección de Trabajo. Los controles, realizados jueves y viernes en Novelda, detectaron cerca de 25 inmigrantes sin papeles y levantaron actas en cinco explotaciones. Y las inspecciones seguirán. Varios profesionales aseguraron ayer que muchos optaron por no trabajar a la espera de la reunión prevista el lunes en la subdelegación del Gobierno en Alicante. Saben, en cualquier caso, que la vendimia debe seguir porque la Navidad está a las puertas. Otros, añaden fuentes agrarias, no trabajaron ayer porque hay mucha fruta en el mercado.

La campaña, entre octubre y enero, emplea a alrededor de 1.700 personas, un 20% de ellas en el campo, según la Unió de Llauradors. En el pasado, la principal mano de obra inmigrante era árabe, después llegaron los ecuatorianos pero tras el proceso de normalización de 2005 "se fueron a trabajar a otros sectores", explica un agricultor, y ahora los rumanos son el grueso de jornaleros. Los agricultores insisten en sus dificultades para contratar mano de obra, defienden su voluntad de cumplir la ley y reclaman que ésta se adapte a la "excepcionalidad del sector". Explican que la ley les obliga a pedir los permisos de trabajo con demasiada anticipación para conocer sus necesidades. Se quejan de la burocracia y alguno, incluso, apunta que entre los sin papeles detectados había quienes tenían el permiso solicitado. El alcalde de Novelda, el socialista Mariano Beltrá, defendió su apoyo a la legalidad en la contratación, pero también pidió que las administraciones sean más "condescendientes".