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Entrevista:Glòria Marcos | Candidata de Compromís pel País Valencià | Elecciones 27M

"Exigiremos la moratoria urbanística"

Pregunta. En 1999, tras dos legislaturas, Glòria Marcos decidió no continuar en las Cortes. Ocho años después, vuelve. ¿Qué ha cambiado en la política valenciana?

Respuesta. Fundamentalmente, que hay más corrupción, más deterioro de los servicios públicos, una política de imagen que no tiene nada que ver con la realidad de los valencianos y sobre todo ha cambiado que cada vez hay más complicidades sociales entre diferentes grupos y colectivos que dicen que hay que cambiar de políticas, que este ciclo político se tiene que acabar. Por eso vuelvo ilusionada en poder contribuir con todo el trabajo y toda la energía de que soy capaz, para ponerle fin al ciclo del PP y evitar que el bipartidismo niegue la pluralidad en el País Valenciano.

"Nuestro pacto pasa por la recuperación de la democracia social y participativa"

P. ¿Y en qué ha cambiado Glòria Marcos?

R. Creo que he cambiado poco. Sigo bailando en el mismo ladrillo, soy un poquito más mayor, tengo algo más de experiencia, pero sigo teniendo las mismas ganas.

P. Ha dicho usted que en esta convocatoria electoral el voto útil es el de Compromís. ¿Por qué?

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R. Porque es el voto de la alternativa, no es el voto de la alternancia. Nosotros no queremos que cambien las personas, sino que cambien las políticas. Y cuanto más importante sea el apoyo a las candidaturas de Compromís, más capacidad de influencia tendremos en hacer políticas diferentes que contemplen la izquierda alternativa, el valencianismo progresista y el ecologismo político. Hay una serie de propuestas ante las que no titubeamos ni titubearemos. Lo hemos dejado siempre claro: el plan Rabassa, la Copa del América, el circuito de Fórmula 1..., ante esas políticas desmedidas y desmesuradas del PP que ponen el acento en el enriquecimiento rápido y fácil de su entorno y no en las necesidades de la gente corriente como nosotros. Por eso es importante. Somos gente sensata, llena de sentido común, de propuestas realizables, por mucho que el PP quiera demonizarnos.

P. ¿Qué es lo mejor de los 12 años del PP en la Generalitat?

R. Yo no sé si podría decir que hay alguna cosa que es mejor. Desde el punto de vista de ciudadana, de usuaria de los servicios públicos, no puedo decir que haya nada que me guste mucho. Es cierto que ha habido crecimiento económico, pero sin un reparto equitativo, que se ha hecho a expensas de la calidad de vida de todo el mundo. Todo el crecimiento está basado en el consumo interno y en la especulación.

P. ¿Y lo peor?

R. Lo peor es la corrupción generalizada, la censura y el autoritarismo. Eso va directamente contra las bases del Estado democrático. Las trampas, los censos, el censurar Ja en tenim prou o impedir que se vea TV-3, tener una lista llena de personal implicado en graves delitos que tienen que ver con la utilización de recursos públicos, el que nadie investigue las tramas como Terra Mítica y nadie asuma responsabilidades, como en el acidente del metro. En fin, esa sensación de coge el dinero y corre.

P. ¿Qué le parecería otra legislatura de mayoría absoluta del PP?

R. Como siempre, haremos caso de la decisión de los ciudadanos, pero habría situaciones irreversibles. El territorio del País Valenciano es finito y cuatro años más supondrían muchos más de los 400 millones de metros cuadrados que están en en peligro, muchos más de los 95 campos de golf en marcha.

P. ¿Cómo va esta precampaña y cómo prevé la campaña electoral?

R. Estamos haciendo un precampaña de proximidad, porque no tenemos grandes medios, recorriendo el país, presentando candidatos. Y está funcionando. Pero veo poca campaña en comparación con otros procesos electorales, como si faltaran dos meses para las elecciones. Me da la sensación de que unos y otros no quieren movilizar demasiado, no vaya a ser que movilicen al contrario. Nosotros estamos intentando movilizar mucho, pero el PP y el PSPV no se están empleando a fondo.

P. Si se produce una victoria de la izquierda, ¿a qué medidas concedería prioridad su partido en el caso de poder decidir o influir en las políticas del nuevo Consell?

R. Influiremos en función de la fuerza que tengamos. Con más fuerza, influiremos en más cosas, pero en todo caso, exigiremos la moratoria [urbanística], apostaremos por los servicios públicos, las políticas de igualdad, le lengua y la cultura, y exigiremos la recuperación de la ética en la vida política. Tenemos un pacto con la ciudadanía que pasa por la recuperación de la democracia social y participativa.

P. Las relaciones entre EU y el PSPV no han sido demasiado buenas en los últimos tiempos, sobre todo a raíz del nuevo Estatut d'Autonomia. Además, usted ha criticado a los socialistas por considerar que fomentan el bipartidismo. Pero están condenados a entenderse si el PP pierde la mayoría absoluta. ¿Cómo están ahora las relaciones?

R. Cordiales, nunca ha sido de otra manera. Lo que pasa es que a veces el PSPV tiene la tentación de intentar jugar a la utilidad del voto, incluso planteando que nuestras propuestas son intercambiables. Pero eso no es así, nosotros tenemos un perfil nítido que, además, pensamos que habrá que poner sobre la mesa a la hora de hacer políticas diferentes. En EU tenemos una importante cultura de pacto y acuerdos. Lo que es evidente es que nosotros no gobernaremos con el PP.

P. ¿Gobierno de coalición o sólo apoyo parlamentario, condicionado, pero sin entrar en la gestión? ¿Cuál es su opción?

R. En estos momentos esto no está sobre la mesa. Primero, porque habrá dos tiempos, uno para ver el alcance de los acuerdos. Segundo, para EU, la convocatoria de un referéndum interno y después la valoración de la comisión política del Compromís. Y el resultado de ese referéndum dependerá de las propuestas y de compromisos serios para cambiar las cosas.

P. ¿Cuáles son las condiciones imprescindibles que pondrá EU para apoyar al PSPV en un hipotético Gobierno de la izquierda?

R. Eso dependerá de la valoración que haga la comisión política de Compromís. Para EU, esas condiciones pasan por la moratoria, los servicios públicos, la lengua y la cultura, por las políticas de igualdad, planificar la situación de los inmigrantes y sobre todo por la recuperación de la ética y la austeridad. No podemos seguir haciendo propuestas de despilfarro del dinero público.

P. ¿Qué áreas de gestión reclamaría para sí EU en ese Consell?

R. Eso tampoco está sobre la mesa. Nosotros no estamos hablando de carteras, sino de objetivos políticos. Una vez conseguidos estos, ya plantearíamos las negociaciones. Hablaríamos de acuerdos, pero teniendo en cuenta que el PSPV hasta ahora no siempre ha cumplido los compromisos con EU y por lo tanto seremos muy duros a la hora de negociar acuerdos.

P. ¿Glòria Marcos se ve a sí misma como presidenta de las Cortes?

R. Me veo trabajando por el bienestar de los ciudadanos, como he hecho siempre en las Cortes.

P. El PP contempla la posibilidad de perder las elecciones y recurre al discurso del miedo. Pero también parece ver ese escenario con cierto regocijo, pensando en recuperar el poder tras cuatro años de Gobierno de un tripartito al que augura desastres como en Baleares en la legislatura pasada. ¿Cómo evitarlo?

R. Hay dos maneras de evitarlo. Primero, con sentido común. Yo no veo a ninguno del tripartito con una corona de espinas en el viaje a Jerusalén. Somos gente seria. La única garantía de que esto funcione es que el Partido Socialista cumpla sus compromisos. Segundo, que en el Compromís ninguno tenga la tentación de ir por su cuenta, pensar que esto es un acuerdo de legislatura, como mínimo, y por tanto todo el mundo tiene que ser muy serio y respetar los acuerdos internos.

UN TITULAR PARA UN TEMA

El accidente del metro. La prueba de la falta de responsabilidad de Camps, que ha huido de recibir a las familias. Eso no lo puede hacer un presidente de la Generalitat.

El cierre de TV-3. Una muestra del autoritarismo y la censura del PP, que se niega a la pluralidad.

El circuito urbano de Fórmula 1. Desmesura, una locura absoluta de quienes quieren una ciudad escaparate sin tener en cuenta los problemas que genera a los ciudadanos.

Ja en tenim prou. El grito de los ciudadanos más concienciados del país.

Canal 9. Un desastre desde el punto de vista económico y un medio de comunicación al servicio exclusivo del PP y de sus intereses.

Censos electorales inflados. Una trampa al Estado democrático que no sólo es un delito electoral, sino la voluntad expresa de hacerle trampas a la democracia.

Urbanismo. Depredar para enriquecer a unos pocos a costa de deshacer el país.

El problema del agua. Hay un déficit hídrico en el País Valenciano que el PP manipula conscientemente en lugar de apostar por otra cultura.

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