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Fabra amplía docentes y grupos en los institutos

La Generalitat trata de revertir el recorte de la plantilla docente aplicado el curso pasado y ayer ordenó a la inspección educativa autorizar nuevos grupos de Secundaria y de Bachillerato a partir de 30 y 35 alumnos, respectivamente. La medida supondrá grupos más reducidos de 15 alumnos por aula y, por tanto, el aumento de profesorado, aunque sea a tiempo parcial en los institutos. El jefe del Consell, Alberto Fabra, también se comprometió a que el pleno apruebe una "partida extraordinaria" para que, antes que empiece el curso el 14 de septiembre, todos los equipos directivos de los 383 institutos públicos reciban los pagos atrasados de los gastos de funcionamiento.

La Generalitat intenta así abortar cualquier conato de contestación o de movilizaciones en los institutos, alejándose de la conflictividad que acecha a los presidentes del PP de las comunidades autónomas de Madrid, Castilla-La Mancha y también Galicia, que vivió protestas callejeras de miles de profesores por los recortes de presupuestos y plantillas docentes.

Ciscar busca evitar la confrontación que afecta a tres comunidades del PP
Los gastos de funcionamiento se pagarán antes del 14 de septiembre

Los directores de Secundaria, que ayer estaban en reunidos en asamblea en el instituto público Lluís Vives de Valencia, conocieron ambas decisiones directamente del gabinete del consejero de Educación, José Ciscar.

A las nueve de la mañana, antes de comenzar la asamblea de directores, un miembro del gabinete del consejero llamó a Ximo Carrión, presidente de la asociación profesional de directores de Secundaria, para que éste informara a todos sus colegas de las medidas adoptadas por Fabra.

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La Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos, FAPA-Valencia, reprochó ayer, en rueda de prensa, que el Consell ahogue a los institutos reteniendo desde enero de gastos de funcionamiento, que por cuatrimestre suponen entre 9.000 y 20.000 euros, dependiendo del tamaño.

María José Navarro, presidenta de la entidad, espera que el presidente Fabra, cumpla con el compromiso de eliminar en la presente legislatura los 900 barracones existentes. "Entre los 6.000 y 10.000 euros al año, se podrían habilitar centros escolares en condiciones", propuso.

Navarro alertó sobre la falta de guarderías públicas de 0 a 3 años y de colegios de Primaria, ya que en Valencia hay "600 niños más, que plazas escolares", lo que obliga a los padres a "matricularlos en centros privados, ya que no hay oferta para la demanda real existente".

Pese a las críticas, Navarro destacó "el cambio de actitud" del nuevo consejero Ciscar, al abrir "una vía de negociación" que "estaba rota". Si bien, le pidió que concrete las medias anunciadas contra el fracaso escolar porque, si no lo hace, será "muy difícil" reducir esta lacra que afecta al 40% de alumnos.

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