Font de Mora prefiere el inglés a un idioma "extranjero" como el catalán
El consejero opina sobre la iniciativa de Esperanza Aguirre en Madrid
Los políticos en campaña electoral afirman cosas que, en cualquier otra circunstancia, nunca dirían. El disparate de la jornada correspondió ayer al consejero de Educación Alejandro Font de Mora quien, al reclamársele su opinión por la iniciativa de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, de crear una escuela pública en catalán, contestó que desde la Generalitat se prefiere "potenciar el inglés, en lugar de cualquier otro idioma extranjero". En su ambición por captar todos los votos posibles de todos los sectores, Font de Mora no tuvo el menor empacho en suprimir el catalán del conjunto de los idiomas que se hablan en España.
El consejero de Educación que, cuando viaja a las Baleares no tiene el menor problema en hablar salat, la variante dialectal catalana de las islas, fue muy respetuoso con las competencias que en materia educativa le corresponden a la autonomía madrileña: "Puede tener en cuenta lo que proceda".
El Sindicat de Treballadors de l'Ensenyament del País Valencià (STEPV) calificó de "deplorables" las declaraciones de Font de Mora. Para el sindicato, "referirse al catalán, la lengua que hablan los valencianos, como una lengua extranjera es impropio de un consejero de Educación y pone en evidencia la constante utilización de la lengua como elemento de confrontación política y social".
Esperanza Aguirre anunció el pasado martes en Lleida su intención de que los padres que lo deseen puedan escolarizar a sus hijos en catalán en un centro público que llevará el nombre del ex presidente de la Generalitat de Cataluña Josep Tarradellas. La presidenta madrileña aclaró que este colegio, que ofrecerá también enseñanza en castellano, será una realidad si hay un grupo importante de alumnos inscritos Aguirre explicó que esta es la política lingüística que en materia educativa defiende el PP. Y concretó que el primer curso en que se aplicará esta medida será el 2008-2009 en los centros de primaria contratados por la Comunidad de Madrid.
