Font de Mora sólo se pone a disposición de los rectores
El malestar del consejero de Educación, Alejandro Font de Mora, con las universidades valencianas, que han hecho públicos los graves problemas que les provocan los retrasos en el pago de los fondos por parte de la Generalitat, quedó de manifiesto ayer de una forma poco habitual: el consejero desaprovechó una oportunidad de oro para atacar al Gobierno por dejar a las universidades valencianas fuera de la fase final del Campus de Excelencia. Algo raro teniendo en cuenta que en septiembre, cuando el Ejecutivo eligió el proyecto de la Universitat de València y recomendó a la Politécnica sumarse a él, Font de Mora sí criticó al Ministerio de Educación. Lamentó que no les hubiera dado un campus de excelencia a cada una, y evitó felicitar a la Universitat.
Ayer, en cambio, se limitó a declarar que ambas universidades son merecedoras de la etiqueta, se puso a disposición de los rectores, y añadió: "Quienes han tomado la decisión tendrán que explicarse ya que, a priori, la exposición del proyecto fue particularmente brillante".