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La Generalitat tiene problemas para colocar los bonos patrióticos

"Habrá que ayudarles", dijo Rajoy, porque si no los coloca irá a la "quiebra"

El Consell se está encontrando con más problemas de los previstos para colocar los 1.800 millones de euros en bonos patrióticos. Una cantidad de la que depende la amortización de la anterior emisión de bonos patrióticos, que supondrá un desembolso de 1.584 millones, y también el plan de pago para los proveedores que llevan meses sin cobrar

El comentario lo realizó el propio presidente electo, Mariano Rajoy, el pasado jueves en la reunión con los presidentes autonómicos del partido para analizar la situación económica. En ausencia de Alberto Fabra, que se retrasó para atender la sesión de control en las Cortes Valencianas, Rajoy argumentó que la situación de los mercados financieros era tan complicada que una autonomía se estaba encontrando con problemas para colocar su emisión de deuda. Aunque no mencionó ninguna comunidad autónoma, todos los presentes entendieron que Rajoy se estaba refiriendo a la Comunidad Valenciana.

La colocación de la emisión depende de un total de 11 cajas y bancos
La suscripción acaba el mismo día que se pagan los bonos anteriores
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El Consell coloca 650 millones de euros en bonos patrióticos de los 1.800 emitidos

En su intervención, el presidente nacional del PP advirtió que si la citada autonomía no colocaba la emisión de deuda, se podría ver abocada a la quiebra, lo que haría necesario ayudar a esta comunidad autónoma.

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"Habrá que ayudarles", sentenció Rajoy, según indican fuentes del PP.

La Consejería de Economía evitó dar información ayer sobre el ritmo de colocación de los bonos patrióticos porque no se ha llegado al ecuador del periodo de suscripción y porque se facilitará información cuando se llegue a cifras redondas.

La consejera portavoz, Lola Johnson, justificó la ausencia de datos oficiales sobre la suscripción porque la emisión se inició el jueves 24 de noviembre y ayer se había consumido la primera semana completa.

"Todavía quedan muchos días [para que se puedan suscribir bonos patrióticos de la Generalitat], prácticamente quedan dos semanas", se justificó la portavoz del Gobierno valenciano.

La tercera emisión de bonos patrióticos de la Generalitat, que se pueden suscribir hasta el 16 de diciembre, está destinada a particulares y garantiza una rentabilidad del 5% anual a un año y del 5,5% anual a dos años. Las suscripciones van por tramos de 1.000 euros hasta un máximo de dos millones de euros por persona. La aspiración de la Consejería de Economía es que un 30% de la emisión se suscriba a dos años. En caso de tener éxito, Economía podría ampliar la emisión hasta los 2.607 millones.La Generalitat necesita colocar el máximo posible de bonos patrióticos porque necesita ese dinero, que le niegan los mercados financieros, para abordar tres cuestiones urgentes.

Primero, amortizar la anterior emisión de bonos patrióticos de 1.500 millones más los 84 millones adicionales que tendrá que abonar por los intereses. Una cantidad que vence el mismo día que está previsto que se cierre la suscripción de la actual emisión de bonos patrióticos.

Segundo, obtener liquidez para presentar un plan de pago a los proveedores, algunos de los cuales llegan a acumular retrasos de hasta dos años, el próximo mes de enero, tal y como anunció el consejero de Hacienda, José Manuel Vela.

Y tercero, aligerar la presión sobre la tesorería de la Generalitat para poder avanzar en la reforma del sector público empresarial. La Consejería de Economía pretende tener lista para el primer semestre de 2012 la Corporación Pública Empresarial. Además, el Consell pretende abordar el año que viene el proceso de reconversión en Ràdio Televisió Valenciana, que arrastra una deuda superior a los 1.200 millones de euros y que con 1.800 empleados dobla en personal a algunas de las principales cadenas estatales privadas.

La agencia de calificación Fitch admitió ayer la existencia de tensiones de liquidez en las autonomías por las difíciles condiciones económicas y fiscales existentes, así como por el cierre, en la práctica, de los mercados de capitales.

La colocación de bonos patrióticos está a cargo de 11 entidades financieras, incluidos la CAM y el Banco de Valencia, intervenidos por el Banco de España, que han asegurado la colación de 800 millones. A partir de ahí, la búsqueda de inversores particulares capaces de comprar el grueso de los bonos patrióticos se complica, dado que las propias entidades financieras compiten con el Consell en la captación de depósitos.

La Generalitat tiene que afrontar, además de los bonos patrióticos que coloque ahora a un año, un total de 1.357 millones de euros en vencimientos el año que viene, según Economía.

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