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Miles de toneladas de algas se amontonan en las playas cinco días después del temporal

Cinco días después del fuerte temporal marítimo que azotó la Comunidad Valenciana numerosas playas del litoral seguían plagadas de algas. Los ayuntamientos no habían podido eliminar ayer esta molestia para los bañistas y, en algunos casos, las montañas de estas plantas acuáticas y su olor por putrefacción tras cinco días sobre la arena seguían dificultando el acceso al agua y amargaban el día a más de un veraneante. Las tareas de limpieza se interrumpen "por razones de seguridad" durante el día.

En la playa de San Juan de Alicante, por ejemplo, pocos turistas se atrevían con el baño y no faltó quien protestó por una suciedad que contrastaron con la mejor situación de la vecina playa de Muchavista, que pertenece al término municipal de El Campello. En ambos municipios gobierna el PP. El estado de las playas urbanas de Valencia fue criticado por la oposición socialista, que lo calificó de "lamentable espectáculo".

El Campello tiene el litoral mayor de toda la provincia de Alicante, 23 kilómetros. Un portavoz del Consistorio explicó ayer que iniciaron las labores de limpieza al día siguiente del temporal y que pese a los esfuerzos, aún queda mucho trabajo, sobre todo, en las calas porque los trabajos deben hacerse a mano y son de más complicado acceso.

La cantidad de algas acumuladas se contaba por miles de toneladas. En la ciudad de Valencia, el Ayuntamiento aseguraba haber retirado más de un millón de kilos desde el lunes. En Gandia se había recogido algo más: 1.600 toneladas sólo en la playa norte. Parecidas invasiones de algas arrastradas por el fuerte oleaje del pasado viernes se registraron en otras playas de las comarcas de La Marina, La Safor, L'Horta y Camp de Morvedre.

La polémica política saltó en Valencia. La concejala socialista Carmen del Río lamentó el "abandono" municipal de las playas. Aparte de las algas, dijo Del Río, "las papeleras, insuficientes en las zonas más concurridas de las playas de El Cabanyal y La Malvarrosa aparecen a diario totalmente llenas y con bolsas de desperdicios esparcidas a su alrededor"; si los responsables de conceder las banderas azules "visitaran estas playas", prosiguió, "propondrían que no se izara ese distintivo hasta que las condiciones de calidad ambiental estuvieran garantizadas".

El Ayuntamiento se defendió asegurando que, una vez pasado el temporal, el mar ha continuado depositando algas en la arena por la noche. El Consistorio agradeció también "la paciencia" de los ciudadanos ante el problema.

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