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La OAMI renuncia a su ampliación y unifica su sede

Concentrar en vez de ampliar. La OAMI (Oficina de Armonización del Mercado Interior, Marcas, Dibujos y Modelos) renuncia a construir otro edificio en Alicante, como pensó inicialmente, y proyecta aglutinar todos sus servicios en su sede. El presidente de la oficina, Wubbo de Boer, anunció ayer un proyecto para "ampliar la capacidad y modernizar las instalaciones". "Más barato", dijo, y más eficaz "concentrar a toda la gente". De Boer explicó el proyecto en la visita que una delegación de la comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento Europeo realizó para analizar el funcionamiento de esta oficina, con un superávit de 300 millones, y estudiar aplicar el modelo lingüístico en la oficina de patentes de Múnich. Los eurodiputados Manuel Medina Ortega (PSE) y Hans-Peter Mayer (PPE) destacaron la "excelente" gestión de la oficina.

La agencia europea pretende solicitar en julio ofertas para acometer el proyecto y espera recibir autorización en otoño con la previsión de concluir en 2010. La OAMI tiene dos edificios en la partida de Agua Amarga y alquila instalaciones. Con este proyecto, 200 trabajadores serán integrados. En la oficina trabajan algo menos de 700 personas (150 de ellas desde su casa). La construcción de otro edificio habría supuesto invertir 25 millones, según fuentes sindicales.

La OAMI apuesta por las nuevas tecnologías que De Boer cree que no implicará, en dos o tres años, una reducción de personal aunque esta senda en el futuro "hará perder algún tipo de trabajo, pero también surgirán otros".

Preocupación sindical

Durante la visita, el comité de personal de la OAMI trasladó a la presidenta de la delegación, la polaca Lidia Joanna Geringer de Oedenberg (PSE) su preocupación por la política laboral de la oficina, según fuentes del sindicato de la OAMI. El comité observa con preocupación una visión de futuro que creen que tiene menos en cuenta la importancia del factor humano y puede convertir la OAMI en una "fábrica de marcas". Las mismas fuentes explican que los 640 empleados (con contrato europeo o funcionarios y temporales) superan el millar si se suma el personal externo y los contratados a través de ETT. Una situación que temen que puede perjudicar la calidad del trabajo.

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