El PP cree que tendrá más votos pese a las imputaciones

Los dirigentes del PP valenciano se mostraron ayer en Alicante convencidos de que las "imputaciones" de sus cargos públicos por supuesta corrupción no les restarán votos en las próximas elecciones, sino al contrario, que servirán de revulsivo para elevar su apoyo electoral. Esta tesis fue el eje de la reunión de los parlamentarios populares por Alicante, liderada por el portavoz del Grupo Popular en las Cortes Valencianas, Rafael Blasco, y la alcaldesa de Orihuela, Mónica Lorente, en calidad de anfitriona y ante la ausencia del líder provincial del PP, José Joaquín Ripoll.

Lorente y Blasco calcaron un discurso en el que redoblaron sus acusaciones al Gobierno de estar detrás de las últimas imputaciones de cargos populares, entre ellos, Ripoll, por su supuesta implicación en el caso Brugal. "Los socialistas están detrás de todo, pero no les servirá de coartada para lo que no saben hacer en las urnas", dijo Lorente. Mientras, Blasco expresó su solidaridad con los cargos del PP "que están siendo objeto de una campaña de difamación absolutamente inadmisible". Blasco señaló que el Gobierno de Camps no solo llegará al final de esta legislatura, "sino que se prorrogará en la siguiente, donde el PP tendrá mejores resultados electorales".