El PP se suma a la Casa del Mediterráneo para Alicante
El PP aparcó ayer, al menos de cara al público, las discrepancias que mostró desde el primer momento al proyecto que anunció el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en la pasada campaña electoral para que Alicante acoja la sede de la Casa del Mediterráneo. El anuncio del presidente socialista pilló por sorpresa al PP, que lo primero que hizo fue desacreditar la idea y luego cuestionar su ubicación.
Sin embargo, ayer, convocados por la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Leire Pajín, los dirigentes del PP cambiaron de discurso. "Que se haga donde sea y como sea, será positivo para Alicante", dijo el alcalde, Luis Díaz Alperi. "Confío en que en 2008 podamos ver los primeros pasos", agregó el vicepresidente del Consell, Vicente Rambla. Las buenas intenciones manifestadas tuvieron un momento de sombras, cuando el alcalde puso ciertos reparos a su ubicación en la antigua Estación de Murcia. "No está decidido, es una posibilidad viable si se solucionan algunos problemas", dijo Alperi, que citó como problemas los accesos y las obras del soterramiento. El alcalde confesó que su apuesta es que vaya en Serra Grossa. Pajín intentó centrar el debate y reconducir la situación.
El Gobierno presentó ayer a las administraciones implicadas un borrador de estatutos del futuro consorcio que gestionará el proyecto. "Máxima prioridad, a caminar todos juntos en esta apuesta por la diplomacia", dijo Pajín, que desveló que la Agencia Española de Cooperación Internacional tiene previsto un millón de euros para el proyecto y la propuesta inicial es que el Gobierno central asuma el 60% del presupuesto y el resto de administraciones, el 40%. Alperi, al final, resumió: "Todo está muy verde".
