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Reportaje:Apuntes

Seducirlos por el bolsillo

Las facultades contratan alumnos para trabajar en el campus, premian los mejores expedientes y subvencionan a empresas que hacen fijos a sus titulados

Gratifican con 600 euros a los mejores alumnos. Contratan estudiantes para realizar trabajos en el campus. Y subvencionan a las empresas que ofrecen a los titulados empleos estables. Hace apenas una década, con las aulas masificadas, las universidades tenían bastante con formar a los alumnos. Pero la progresiva reducción de alumnos universitarios y la redefinición de los objetivos sociales de las facultades hacen que hoy los campus oferten cada vez servicios más avanzados. Los últimos reclamos apuntan al bolsillo y al trabajo.

Desde el año pasado, la Universidad Politécnica de Valencia premia los mejores expedientes de los alumnos recién llegados y también a los ya titulados. Se otorgan 32 premios por categoría, con una dotación económica de 600 euros.

"El dinero es un aliciente. Y ayuda sobre todo a comprar libros"
El aumento de servicios ha ido en paralelo a la caída de matriculados

Con un 9,9 de nota media en las pruebas de Selectividad y también en Bachillerato, Alberto Navarro fue uno de los galardonados el curso pasado. El estudiante de Ingeniería de Caminos, procedente de Albacete, conoció la existencia del premio ya matriculado. Hace un año, tras un ágape, recibió del rector y del resto del equipo directivo un cheque, un diploma acreditativo y la fotografía de grupo para el recuerdo. "El premio es un aliciente que ayuda sobre todo a la compra de libros", señala el estudiante que este año, con más de un nueve de media, concurre otra vez a la convocatoria.

Irene Albaladejo, en Biotecnología, y Juan Manuel San Andrés, en Ingeniería Técnica Industrial, también rozaron el 10 ganando así el premio el curso pasado. Ambos fueron informados de la posibilidad de solicitar esta ayuda al formalizar la matrícula. En el Alicante natal de ella y en el módulo de Formación Profesional que cursaba él, no habían llegado noticias de la existencia de tal distinción. Ganarla les ha servido para pagar algo en un año, el primero, repleto de gastos.

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Pero las universidades no sólo ponen en marcha iniciativas que premian a sus estudiantes, también participan en otras en las que se facilita la inserción laboral de sus ya titulados universitarios premiando a las empresas. Parece que las universidades se han metido en la cabeza que el índice de empleo de sus egresados puede ejercer de imán hacia nuevos alumnos.

La Universitat de València, a través de la Fundación Universidad Empresa (Adeit) y la Politécnica de Valencia llevan entre seis y cuatro años participando en los Planes Integrales de Empleo del Servei Valencià d'Ocupació i Formació (Servef). En ambas participarán 121 desempleados. El director del Departamento de Empleo de Adeit, Germán Ferreiro, explica que la fundación se encarga de formar a los jóvenes desempleados y seleccionar a los más idóneos. La empresa que contrate a estos jóvenes universitarios de manera estable recibirá 6.000 euros. En la Politécnica prevén alcanzar una inserción de dos terceras partes de los participantes, en un puesto de trabajo que sea acorde con su titulación.

Crea, centro médico de reproducción asistida, la empresa que este verano consiguió que naciera el primer niño en España libre de la enfermedad de los huesos de cristal, ha contratado dos titulados de la Universitat de València a través de este sistema de los planes de empleo. "De la subvención, que está muy bien, nos enteramos después. A nosotros lo que nos interesa es disponer de gente en prácticas, a la que podamos conocer y si surge el puesto, ofrecerles trabajo", afirma el codirector de la empresa genética, Miguel Ruiz, quien además indica que la nueva savia favorece el reciclaje formativo del resto de la plantilla.

La Fundación Universidad-Empresa también promueve junto con la Caja de Ahorros del Mediterráneo un programa para mejorar la integración en las empresas de los todavía estudiantes de la Universitat que realizarán prácticas en éstas. Este curso gratuito de 105 horas de duración llamado Unecam permite además del aprendizaje de competencias, la incorporación del estudiante a una bolsa de trabajo y el reconocimiento de seis créditos para su expediente académico.

Desde la Politécnica de Valencia, la universidad española con más convenios firmados con empresas (hasta 8.000) para que sus alumnos realicen prácticas, según la revista Popular Science, y recogidos en la web de la Fundación Española para la Ciencia y Tecnología, dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación, pretenden que todas ellas estén remuneradas.

El curso pasado el 89,2% de las prácticas (que en la mayoría de las titulaciones de la universidad no son obligatorias) incluía bolsa de ayudas, lo que supuso un ingreso de cerca de 12 millones de euros a los estudiantes de la universidad, según los datos facilitados por el Servicio Integrado de Empleo de la Politécnica de Valencia.

"Mejor aquí que sirviendo copas"

"Pretendemos dignificar el trabajo del estudiante y que tenga otra alternativa de trabajo ofertada desde el campus a la de servir copas por la noche o repartir pizzas". Esta idea es, según el subdirector del Servicio Integrado de Empleo de la Politécnica de Valencia, Pedro Zamora, lo que inspiró a la universidad para dar la oportunidad a los universitarios de adquirir experiencia laboral en el propio campus mientras estudian.

La convocatoria puesta en marcha a finales del año pasado permite que los estudiantes trabajen con todas las ventajas que conlleva un contrato laboral en la ayuda a la organización de actos culturales y de eventos deportivos; en el pase de encuestas al profesorado; la ordenación de material bibliográfico; el desarrollo y diseño informático, y en tareas audiovisuales. Zamora insiste en dejar claras dos ideas: el contrato anual del estudiante nunca puede superar las 600 horas, para que pueda compatibilizarlo con los estudios (la continuidad del contrato está supeditada a un progreso académico adecuado) y la labor de los estudiantes no podrá sustituir a las tareas que realiza el personal universitario.

En un comunicado facilitado por la propia universidad, el rector Juan Julián calcula que a lo largo de este curso se realizarán 22 convocatorias de trabajo y se ofertarán 264 empleos, cuyo presupuesto total alcanza los 600.000 euros.

Con esta iniciativa, la universidad se ha convertido, siguiendo siempre la nota oficial, en el primer centro español en "hacer posible el trabajo a tiempo parcial de los alumnos que lo deseen, una práctica que no es común aquí pero sí es muy habitual en Estados Unidos". Julià considera que se está evolucionando hacia "un nuevo modelo de universitario que combina estudio y trabajo" y vaticina que "seguro que las universidades vecinas van a tomar nota".

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