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Solo el 1,8% de los alumnos cursan la carrera íntegra en valenciano

El 76% de los estudiantes y el 56% de los profesores saben escribirlo

Ignacio Zafra

Las universidades públicas (al menos la mayoría de ellas) han sido la punta de lanza en la normalización del uso del valenciano. Pero también en su seno el proceso presenta serios problemas. Quedó de manifiesto ayer de nuevo con la presentación de un informe elaborado por investigadores universitarios, en colaboración con la Acadèmia Valenciana de la Llengua, sobre 5.000 encuestas a alumnos, profesores y Personal de Administración y Servicios (PAS). La primera conclusión es que el 53,7% de los alumnos recibe todas las clases en castellano, mientras que sólo un 1,8% estudia íntegramente en valenciano.

La situación varía notablemente, sin embargo, entre los centros. En parte, señala el estudio, por las diferentes políticas aplicadas y por lugar de origen de buena parte de su personal. El resultado es que en la Universitat de València el 34,8% de los alumnos asegura recibir la mitad o más de la mitad de las asignaturas en la lengua propia. En Castellón, el 32,6%. En la Politécnica, el 11,2%. En Alicante, el 5,4%. Y en la Miguel Hernández de Elche (una universidad donde la oferta en valenciano es prácticamente nula), el 0,8%.

Algo más de la mitad estudia toda la titulación en castellano
Los rectores dicen que trabajarán para equilibrar la situación

Los coordinadores del informe, Artur Aparici y Rafael Castelló, consideraron agotado el modelo actual, basado "en la voluntad personal del profesorado". El informe revela que dos tercios de los docentes nunca han dado una clase en valenciano. El 8% da todas las clases en esa lengua. Algo menos, entre el 6% y el 7%, lo utiliza siempre en la pizarra, en la preparación de los materiales y exámenes. El 20% asegura utilizarla en "alguna" asignatura.

Alcanzar una universidad con equilibrio bilingüe (ahora se da un bilingüismo asimétrico) "es difícil pero no imposible", afirmaron los autores. "Para avanzar en la equiparación, las universidades tendrán que reglamentar la carrera docente y planificar la creación de una plantilla perfilada en valenciano", añadieron.

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Nueve de cada 10 entrevistados declararon entender "bien o bastante bien" el valenciano cuando se trata de escucharlo o leerlo. La escritura presenta muchos más problemas. Y es un apartado en el que los estudiantes superan a los profesores: el 76% de los primeros asegura saber hacerlo, mientras que entre los docentes cae hasta el 56%.

El mejor resultado en escritura lo obtiene la Universitat Jaume I de Castellón, donde los porcentajes de conocimiento del valenciano alcanzan el 78% entre profesores y el PAS, y el 80% entre el alumnado. La universidad de La Plana es la única que ha establecido el conocimiento del valenciano como requisito para acceder a una plaza de administración o servicios.

Los cuatro rectores presentes en el acto (no asistió el de Elche, Jesús Rodríguez Marín, que fue sustituido por el vicerrector Fernando Borràs) celebrado en el monasterio de Sant Miquel dels Reis y presentado por la presidenta de la Acadèmia, Ascensió Figueres, recogieron el guante. El informe, indicó Esteban Morcillo, rector de la Universitat, servirá para impulsar las "medidas adecuadas" para incrementar el uso del valenciano. Será necesario implantar "nuevas políticas", dijo Vicent Climent, rector de la Jaume I, "porque debemos ir mucho más allá". "Tenemos mucha presencia en la sociedad", agregó Ignacio Jiménez Raneda, rector de la Universidad de Alicante, "y esta se fija en lo que hacemos"; "debemos estar en la vanguardia". "Debemos hacer los esfuerzos necesarios", remató Juan Juliá, rector de la Politécnica de Valencia, "porque es nuestra obligación y porque es el mejor testimonio de nuestra identidad".

Figueres consideró necesario "preocuparse no solo por el uso del valenciano en sentido cuantitativo, sino también cualitativo".

El estudio contiene avisos en ese sentido. Algunos, como el uso del catalán en la investigación universitaria, parecen difíciles de revertir. En este ámbito, sobre todo en las publicaciones, el valenciano no solo compite con el castellano, sino también con el inglés. La auténtica rivalidad se da, en realidad, entre estos dos últimos idiomas, por lo que la presencia del valenciano es más bien testimonial.

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Sobre la firma

Ignacio Zafra
Es redactor de la sección de Sociedad del diario EL PAÍS y está especializado en temas de política educativa. Ha desarrollado su carrera en EL PAÍS. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Valencia y Máster de periodismo por la Universidad Autónoma de Madrid y EL PAÍS.

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