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Terra Mítica despide a todos los trabajadores y al equipo directivo

El parque de Benidorm perdió el año pasado más de 16,4 millones de euros

Veinte días ha tardado la nueva dirección de Terra Mítica en tomar medidas drásticas en el parque desde que el Consell decidió, con la anuencia de Bancaja y la CAM, ceder su explotación a la empresa Aqualandia-Mundomar. La nueva dirección informó ayer a toda la plantilla y a su equipo directivo que serán despedidos en apenas tres semanas. Terra Mítica tenía previsto abrir este año casi 10 meses, desde principios de marzo hasta el 18 de diciembre. No será así. Los 400 trabajadores contratados temporalmente ya han recibido la comunicación de que cesarán tres meses antes, a finales de septiembre, justo cuando la nueva dirección de la empresa ha decidido cerrar el parque para acometer reformas. El centenar de trabajadores fijos también serán despedidos a través de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) posterior al cierre de puertas a finales del verano, y toda la cúpula directiva deberá abandonar sus actuales cargos para dejar paso a los nuevos gestores, incluyendo al director general, Juan José de Torres, contratado hace poco más de un año.

Con estas medidas, la futura dirección espera recuperar la caída de visitantes y facturación. Este año pasado el parque perdió 16,4 millones de euros. Terra Mítica levantó la suspensión de pagos tras acumular un pasivo de 218 millones de euros. La venta a Enrique Ortiz por 85 millones de su suelo de reserva le permitió presentar dos ejercicios consecutivos con beneficios, pero la última cifra conocida de visitantes estaba ya por debajo del millón, similar a la de un parque acuático como Aqualandia, que lleva 25 años abierto y alcanza los 900.000 clientes abriendo solo entre marzo y septiembre, justo el futuro que le espera a Terra Mítica. El parque, que cumple 10 años, fue traspasado el pasado 28 de julio a la empresa que gestiona Aqualandia-Mundomar en régimen de alquiler con una opción de compra durante los próximos 10 ejercicios. Las cifras en las que se cerró la operación únicamente cubrían los números rojos que arrastra. El canon anual de 1,8 millones servirá para hacer frente a los intereses de los préstamos bancarios vivos, mientras que la opción de compra que valora Terra Mítica en 75 millones de euros viene a ser la deuda acumulada los últimos años.

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