Las Trobades cierran temporada con un clamor por la enseñanza del valenciano

Fin de temporada. Las Trobades per l'Ensenyament del Valencià cerraron ayer su edición de este año con una consigna clara: un clamor a favor de la retirada del proyecto de sistema de educación plurilingüe anunciado esta semana por el consejero de Educación de la Generalitat, Alejandro Font de Mora, que "pretende fulminar la enseñanza en valenciano".

Unas 15.000 personas se dieron cita en las Trobades que cerraron ayer la serie en Ibi (L'Alcoià) y Relleu (La Marina). El proyecto del Consell "deja a un lado el inglés y discrimina el valenciano, solo pretende imponer el monolingüismo en castellano", dijo Vicent Moreno, presidente de Escola Valenciana, entidad organizadora de las Trobades. "Hacemos un llamamiento a los valencianos a plantarse a decir que hasta aquí hemos llegado".

Pero el cierre tuvo un contrapunto desagradable: el alcalde electo de Relleu, Santiago Cantó, del PP, impidió la lectura del manifiesto preparado por los organizadores, que reivindicaba la enseñanza en valenciano y el papel social de la lengua. Cuando el presidente de la Coordinadora d'Escoles d'Ensenyament en Valencià de La Marina Baixa, Pere Ramon Zaragocí, se disponía a leerlo, Cantó subió al escenario y lo impidió, llegando a amenazar con la intervención de la Policía Local.

Más de 220.000 personas han asistido este año a las Trobades, que tendrán continuidad en las movilizaciones preparadas en defensa de un modelo educativo de calidad en valenciano. Entre los actos previstos destacan las concentraciones del día 9 de junio en las tres capitales valencianas. Escola Valenciana ha propuesto a los partidos políticos extender esa movilización con concentraciones el día 11 de junio, en que se constituyen los Ayuntamientos.