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Apuntes

La Universidad de Alicante recorta sueldos por impagos del Consell

No hay dinero para los complementos de productividad. Y eso significa que los profesores y el personal de administración y servicios del campus de Alicante están cobrando menos debido a la falta de liquidez de la Generalitat.

La Universidad de Alicante se ha visto obligada a aplazar hasta el mes de febrero del próximo año el pago de los complementos de productividad correspondientes al personal de Administración y Servicios (PAS) y al Personal Docente e Investigador. La medida se ha adoptado, según fuentes del rectorado, por "los problemas de tesorería y por la falta de liquidez de la Generalitat".

Las alarmas se han encendido en el campus de la Universidad de Alicante entre profesores y personal de administración, porque en su última nómina les confirman que los completos de productividad, aprobados en el Plan de Ordenación Integral (POI), están "pendientes" de pago. En el caso de los profesores, la cantidad anual prevista ronda entre los 1.000 y 1.200 euros y en entre el personal de Administración y Servicios pueden ser unos 40 o 60 euros mensuales. Las partidas que han quedado congeladas, hasta que la Generalitat cumpla con sus obligaciones financieras, son unos 2,1 millones de euros del presupuesto de este año previsto para este complemento de productividad entre el personal docente e investigador, y otros 600.000 euros para los 1.800 trabajadores del campus de Sant Vicent del Raspeig adscritos al área de administración y servicios.

Fuentes de la Universitat de València indicaron ayer que "por el momento" no se han visto obligados a adoptar una medida de estas características, como en Alicante, pero recordaron que la situación financiera de las universidades es "delicada". En el resto de campus consultados por el momento no se han aplicado medidas tan drásticas.

No obstante, los campus valencianos arrastran un serio problema de liquidez ya que la Generalitat no les ha ingresado lo previsto en el mes de septiembre, ni octubre. "Confiamos en que en noviembre se regularicen los pagos", admitía ayer el gerente de una universidad valenciana. La Generalitat ha dejado de transferir el dinero previsto para el pago de las nóminas y a los proveedores, con lo que los rectorados han tenido que pedir créditos, y aumentar la deuda. Un panorama que dificulta el acuerdo de un nuevo plan de financiación para las universidades.

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