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La ampliación de la desaladora de Alicante supera el veto del Consell

La nueva planta abastecerá a partir de julio a Alicante, Santa Pola y Elche

Las desaladoras proyectadas por el Gobierno socialista para garantizar el abastecimiento de agua potable en el litoral mediterráneo van superando escollos y dificultades. La mayor urgencia era conseguir que en julio la ampliación de la desaladora de Alicante estuviera en marcha. Tras semanas de incertidumbres y dudas, parece que el tema se resolverá en cuestión de días. El consejero de Agua, Urbanismo y Medio Ambiente, José Ramón García Antón, acaba de firmar la autorización ambiental provisional de la ampliación de la desaladora de Alicante, ubicada en la partida de Agua Amarga. En los próximos días está previsto que la Mancomunidad de Canales del Taibilla, titular de la instalación y responsable del abastecimiento humano, reciba esta autorización provisional. Según confirmaron ayer fuentes del Consell, "en unos días se desbloqueará el tema", y el informe definitivo se aprobará en unas semanas.

Pese al boicoteo del PP a la instalación de plantas desaladoras para el abastecimiento humano, el consejero García Antón se comprometió con los responsables del ministerio a desbloquear este trámite. Fuentes de la Mancomunidad de Canales del Taibilla confirmaron que esta obra de ampliación, que permitirá alcanzar un caudal de 42 hectómetros cúbicos anuales, -en la actualidad produce solo 18-, entrará en funcionamiento en julio. Para esa fecha los habitantes de importantes núcleos urbanos, como Alicante, Sant Vicent, Elche y Santa Pola, beberán agua del mar desalada. "Casi de manera automática, una vez dispongamos del informe favorable, podemos obtener agua", admitió ayer Joaquín Salinas, director de la Mancomunidad de Canales del Taibilla.

Mientras las obras de ampliación de esta desaladora concluyen, las de la planta potabilizadora de agua de mar más grande de Europa avanzan a velocidad de crucero. La planta de Torrevieja generará 80 hectómetros al año y empezará a funcionar a finales de 2008 o principios de 2009. La ejecución de la obra civil de la planta está ya al 80% y las redes de las tuberías que distribuirán el agua a los distintos consumidores, al 20%, según avanzaron ayer fuentes de la empresa pública Acuamed.

Pantanos al 25% después de tres semanas de lluvia

Tres semanas de lluvias prácticamente ininterrumpidas en el conjunto del territorio valenciano han significado más que un alivio paras las enjutas reservas de los embalses. Desde el pasado día 8, cuando se registró el primer episodio de lluvias intensas que barrió la Comunidad Valencia de norte a sur, y hasta el lunes el agua embalsada no ha parado de crecer hasta llegar al 25,2% de su capacidad por lo que toca a los pantanos de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ). El dato supone el mejor registro del julio de 2005.

El agua embalsada a fecha del lunes con respecto a la de hace un mes, en concreto el 28 de abril, supone un incremento del 1% en términos porcentuales y 43 hectómetros cúbicos en valores absolutos. La Confederación Hidrográfica valora el dato, ya que el inicio del período de lluvias coincidió con los desembalses para el arroz y, además, durante las últimas semanas no se ha tenido que hacer uso de las reservas, al contrario que primaveras anteriores.

Las reservas hídricas de los embalses de la CHJ han aumentado en 16,80 hectómetros cúbicos en la última semana. De los 27 embalses adscritos a la Confederación del Júcar, 16 han aumentado el nivel de agua almacenada, siete lo han disminuido, y otros cuatro han mantenido el mismo caudal. El embalse que ha registrado el mayor incremento ha sido el de Benagéber, que ha recibido 4,79 hectómetros cúbicos y llega al 50% de su capacidad. Otros embalses que han incrementado sus reservas han sido los de Alarcón, con un aumento de 2,79 hectómetros, lo que le sitúa al 9,32% de su capacidad; y el de El Molinar, con una subida de 0,94 hectómetros cúbicos.

Por sistemas, el de Marina Baja/Serpis almacena el 85,29% de su capacidad; el de Palancia/Mijares/Cenia está al 62,60%; el sistema Turia está al 44,24%, y el del Júcar al 18,82%.

El mes de mayo está siendo el más lluvioso en la provincia de Alicante desde 1984, según aseguró ayer Jorge Olcina, director del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante. En los últimos 20 días de este mes la lluvia caída (unos 60 litros por metro cuadrado de media en la provincia) duplica la acumulada en los primeros meses del año, cuando se recogieron 30 litros. El experto señaló que las precipitaciones han llegado en el momento justo y "tras meses de aguda sequía". Olcina vaticinó que esta situación de inestabilidad se prolongará al menos hasta la primera semana de junio.

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