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El arte urbano se convierte de nuevo este verano en un eje vertebrador de La Marina

Benissa, Moraira, Dénia y Xàbia proponen estos meses una oferta cultural diferente

Cinco poblaciones de la Marina Alta, (Benissa, Teulada-Moraira, Jesús Pobre, Dénia y Xàbia), proponen a vecinos y visitantes una oferta cultural diferente. Una aproximación al arte urbano, que durante unos meses pasa a formar parte de los lugares comunes de estas localidades, modificando el paisaje y los entornos naturales. Una iniciativa del Grup Reüll, los Ayuntamientos implicados y el Consorcio de Museos de la Comunidad Valenciana, que toma durante el verano los espacios públicos como puntos de encuentro entre el artista y aquel que mira su obra.

Benissa es la primera protagonista de una aventura cultural que nació hace 12 años y que ha ido ganando adeptos en toda la comarca, conformando lo que se conoce hoy como el Circuit d'Intervencions a la Marina. Uno de los proyectos de arte público más importantes y dinámicos de los que se desarrollan en España, basado en la investigación plástica adaptada a los lugares donde el artista se propone intervenir. Ideas, pensamientos, intenciones, que se materializan de las formas más variadas: desde esculturas a intervenciones fotográficas, videoinstalaciones o performances. Obras de arte que buscan una reacción del espectador, una actitud participativa o simplemente su contemplación.

"Intentamos hacer comarca, vertebrar la Marina Alta no sólo a nivel organizativo sino también a nivel plástico". Éste es uno de los objetivos del circuito, según su coordinador, Ramón Cardona, que apunta como uno de los principales logros de esta edición haber recuperado a Dénia para el proyecto. El grupo de intervenciones que se presenta en la capital de la Marina, toma como título genérico Temps, memòria y su ubicación se distribuye bajo la protección de las murallas del castillo. "Pensamos que en Dénia, el Castillo era el lugar idóneo. Un punto donde se potenciaba la relación entre la naturaleza y la historia".

Proteger al hombre y su entorno, al tiempo que evocar una de las tradicionales procesiones nocturnas que se celebran en el Castillo dianense es parte del mensaje de la obra de Josep Ginestar Inici de la pregaria, enclavada en la parte alta de la fortaleza. "Está formada por 51 paraguas. Es un canto a la protección. Durante el día los paraguas abiertos forman una sombra, y por la noche se enciende sobre ellos una bombilla que recuerda a las personas que con cirios van en procesión". El Retorno, de Pamen Pereira, Uesum museu, de J. Ramón Cardona, la intervención de J. P. Llavería Aigua cavallera y Andar por las ramas, de Maribel Doménech, completan las propuestas de Temps, memòria.

L'Espai trobat, en Benissa, ostenta la veteranía. Ocho emplazamientos para los que se presentaron en esta edición unas 130 propuestas, que el jurado tuvo que ir desestimando a pesar de la buena calidad e interés de las instalaciones sugeridas. Las callejuelas estrechas y empedradas del caso antiguo y sus edificios históricos conviven durante el verano con el arte de vanguardia, dando nuevos significados a estos lugares. Alejandro Jiménez, con su intervención Reconstrucción, ha reconvertido la escalonada calle de Cabot en un viñedo, donde las vides reclaman su lugar, ahora ocupado por urbanizaciones. "Quiero hacer recapacitar a la gente para que vea en qué está convirtiéndose la zona costera, con la urbanización desmesurada". También Miguel Ángel Santacreu incita con su obra a una reflexión, pero además invita al público a una participación activa. Su intervención Escoles velles actúa sobre la antigua construcción con un gran panel de plástico que envuelve el edificio, y sobre él se pueden leer nombres de personas que un día poblaron sus aulas. Es un homenaje a alumnos y profesores que formaron parte de este viejo centro, actualmente utilizado como punto de encuentro de asociaciones locales. "Para mí el arte tiene también una función participativa". Por eso Santacreu completa su propuesta con una segunda parte: "He preparado unas 700 tarjetas adhesivas que acompañan una carta, que dejé en Correos para que fueran repartiéndose". La intervención cuenta con un espacio en blanco donde pegar estas tarjetas con el nombre de su autor y su opinión en torno a cuál cree que podría ser el mejor uso para este emblemático edificio. "En las obras plásticas, si no hay espectadores no hay obra", asegura Ramón Cardona. Son una forma de comunicación, pero por si no queda claro el mensaje de cada autor, el texto que acompaña a la intervención puede resolver cualquier duda.

Opiniones sobre el Circuit d'Intervencions a la Marina las hay de todo tipo, pero está claro que las propuestas de los artistas no pasan desapercibidas. Elvira, vecina de Benissa, apoya la idea del circuito, pero pide seriedad a los artistas: "Hay algunas que no me parecen arte". "A mi me llegan más aquellas que me son más próximas, que tienen algo nuestro pero lo muestran de forma original", explica Juan mientras pasea por el Espai trobat. Dolors afirma que le gusta la iniciativa y añade: "Ya estamos acostumbrados en Benissa, son 12 años, y creo que está muy bien". "Me gusta cómo queda la calle, hay algunas muy originales", explica Juan Antonio.

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Este es el calendario: Benissa. L'Espai trobat, del 18 de julio al 7 de septiembre. Teulada-Moraira. Formes i llocs, del 24 de julio al 21 de septiembre. Jesús Pobre. Art i natura, del 25 de julio al 15 de septiembre. Dénia. Temps, memoria, del 26 de julio al 30 de septiembre. Xàbia. Llocs lliures, del 28 de julio al 15 de septiembre.

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