El cierre de dos zapateras deja 80 desempleados
La rutinaria vuelta al trabajo tras el periodo vacacional no ha podido ser para los empleados de dos fábricas de calzado, una en la pedanía ilicitana de Matola y otra en Crevillent. Los trabajadores han encontrado las puertas cerradas. Las empresas Uniline y El Buen Zapato han cerrado dejando a sus 80 trabajadores sin empleo. Esta situación, frecuente en otras épocas de crisis, hacía años que no se producía en Elche. Ha sido una sorpresa para todos, según explicó el responsable del gremio del sindicato UGT en la comarca, Juan Antonio Maciá. Algunos trabajadores, sin embargo, afirman que ya se veía venir porque había poco trabajo. El cierre afecta directamente a 80 trabajadores, a los que hay que sumar los puestos de trabajo indirectos.
CC OO, por otra parte, ya alertó de que en los dos meses de verano se han quedado sin trabajo alrededor de 500 personas en el sector calzado en el Vinalopó. Y mientras, todavía no se ha puesto en marcha en Plan de Apoyo al Calzado, firmado hace casi un año pero que ha quedado paralizado en Bruselas.
