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Un colegio 'extravía' un niño de 3 años durante cuatro horas

"El centro no nos contó nada", dice la madre

David, un pequeño de tres años, se durmió en autobús camino del colegio Hispanidad, en La Vila Joiosa, y pasó cuatro horas desaparecido. El incidente tuvo un final feliz, pero acarreó la indignación de sus padres, porque la dirección del centro lo ocultó. Los progenitores han denunciado los hechos ante la Guardia Civil. Los padres del menor, Francisco Ruiz y María del Mar Borreguero, sospechan que hubo un pacto de silencio para que no trascendiera lo sucedido, y dicen que no se les dio "ninguna explicación, ni por parte de la dirección del colegio ni del Ayuntamiento", de quien depende el transporte escolar. Así que, alarmados, lo primero que hicieron fue llevar a su hijo al hospital comarcal para hacerle una revisión médica. "Espero que nadie más tenga que pasar por no saber qué ha sido de la vida de su hijo durante cuatro horas", dijeron.

El pequeño David se quedó dormido en el autobús camino del colegio el pasado 25 de septiembre. La monitora no se percató de que no descendió del vehículo y el conductor, como cada día, reemprendió la marcha hacia la sede la empresa, en el polígono industrial de Finestrat. La dirección del centro tampoco informó de la desaparición a la profesora del menor.El menor tuvo la suerte de que los autobuses permanecen con las puertas abiertas dentro del recinto de la empresa Llorente Bus para airear los vehículos, así que cuando despertó, pudo bajar y esperar en medio de la explanada del aparcamiento. Y volvió a tener suerte de que una empleada de la empresa lo encontrara antes de emprender la marcha hacia alguna parte y se lo llevara a las oficinas. El hallazgo provocó la revisión de todos los vehículos de transporte escolar hasta que apareció la mochila de David con los datos de su colegio.

La empresa puso los hechos en conocimiento del centro y del Ayuntamiento y el niño fue trasladado en el vehículo particular de un conductor de Llorente Bus al colegio, sobre las 12.30 de la mañana. La dirección del colegio decidió no avisar a su profesora y volvió a casa en el mismo autobús que había tomado por la mañana.

Pero ese mismo día, la maestra de David se encontró a su madre y le preguntó por qué no había asistido a clase, lo que alertó a los padres del crío, que el lunes siguiente se fueron a pedir explicaciones al centro.

Su directora recibió ayer a este periódico, pero se negó a dar cuenta de lo sucedido. Otras fuentes del colegio Hispanidad simplemente apuntaron que el transporte de los alumnos no es de su responsabilidad. Este periódico intentó, sin éxito, conseguir la versión de la concejal de Educación de La Vila Joiosa.

Silencio administrativo

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Ante la falta información, Francisco Ruiz tomó la iniciativa y se plantó en el consistorio vilero para obtener explicaciones del silencio de la Administración cinco días después de haberse extraviado su hijo. El padre del niño afectado sólo obtuvo como respuesta del funcionario que lo atendió que no habían podido hablar con él por falta de tiempo. La respuesta del empleado municipal fue la gota que colmó la paciencia del padre del escolar y le empujó definitivamente a poner los hechos en manos de la Guardia Civil.

La concesión municipal del transporte de alumnos de la enseñanza pública cambió de manos en diciembre de 2008. Pasó de SuBus a Llorente Bus, lo que implicó también la contratación de nuevas monitoras al inicio del actual curso escolar. La empleada que debía vigilar el transporte de los niños en el autobús donde viajaba el pequeño David camino del colegio Hispanidad apenas llevaba un mes en su puesto de trabajo.

María del Mar Borreguero, la madre del niño, muestra la denuncia contra el centro.
María del Mar Borreguero, la madre del niño, muestra la denuncia contra el centro.ROSA FUSTER

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