Los directores de primaria se rebelan por la falta de medios

Se sienten "burocratizados" y ayer salieron a la calle para denunciarlo. Unos 250 directores de centros de infantil y primaria se concentraron ayer ante la dirección territorial de Educación en Valencia para exigir la contratación de personal administrativo: Hoy, según los concentrados, solo cuentan con ellos unos 40 colegios de los cerca de 1.200 que existen en el territorio valenciano. La consecuencia es que los directores "ven desplazada su función directiva por la administrativa, cuando no tienen que robar tiempo de su vida personal para cumplir sus funciones", señalaron desde el sindicato STEPV.

La actual normativa establece que la Consejería de Educación solo dota de personal de administración a aquellos centros que cuentan al menos con tres líneas, "tres niveles por curso", explica Pilar Gregori, miembro del secretariado del STEPV, lo que deja fuera a la inmensa mayoría de los centros.

Las elecciones escolares llaman a votar a un millón y medio de personas

La concentración fue convocada por la asociación de directores de infantil y primaria de la provincia de Valencia, y no tuvo consecuencias para el desarrollo de las clases. Camilo Miró, director territorial, salió a escuchar las reivindicaciones de los concentrados. La solución, indicó el STEPV, pasará necesariamente por una negociación en la que se contemple la extensión del personal al resto de colegios.

El próximo 29 de noviembre, por otra parte, un total de 1.457.113 ciudadanos -entre alumnos, padres y madres, profesores y personal administrativo- está llamado a votar en las elecciones escolares. Es decir, que uno de cada tres ciudadanos valencianos podrá ejercer su derecho de elegir a los representantes de su estamento de entre los 15.000 consejeros que se renuevan en estas elecciones. Aunque para ello habrá que vencer el alto absentismo de colectivos como el de padres, cuyo nivel de participación no ha pasado del 15%, frente al 87% de los docentes, en los últimos años.

El titular de Educación de la Generalitat, Alejandro Font de Mora, reconoció ayer, en conferencia de prensa, el "bajísimo nivel de participación de los padres y madres" y la "dificultad de las familias para conciliar el horario laboral con los requerimientos escolares".