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El dueño de un club encierra a sus atracadores en el ascensor

Los delincuentes le reclamaban, pistola en mano, una deuda

No perder los nervios y tener la sangre fría permitió al dueño de un club de alterne de la playa de San Juan de Alicante retener a dos rumanos, que le amenazaron con una pistola, en el interior de un ascensor. Tras discutir con ellos, por una deuda pendiente con una empleada, los presuntos agresores intentaron escapar por un ascensor, pero el dueño del local quitó la luz y les dejó encerrados en el elevador hasta que llegó la policía nacional y les detuvo. A los detenidos se les imputan los presuntos delitos de amenazas graves y tenencia ilícita de armas.

Fue una noche de sábado muy animada y de película. El dueño de un club de alterne, ubicado en la playa más concurrida de la ciudad de Alicante, logró encerrar en un ascensor hasta que llegó la policía nacional a unos delincuentes que instantes antes le habían amenazado con un arma de fuego para intentar cobrar el dinero que supuestamente adeudaba a una de sus empleadas, de nacionalidad rumana.

Según informó ayer la Comisaría Provincial de Alicante mediante una nota de prensa, los hechos ocurrieron el pasado fin de semana, cuando dos hombres acudieron al local ubicado en la avenida de Bruselas de la zona residencial de la citada playa de San Juan de Alicante.

Los dos hombres, también de nacionalidad rumana y amigos de la trabajadora a la que supuestamente se le debía dinero, llegaron al club de alterne y discutieron con el dueño. Según la policía, uno de ellos llegó a amenazar con una pistola al propietario cuando le exigieron que pagara la deuda que supuestamente mantenía con una trabajadora, que también estaba presente en el momento de la discusión.

Local lleno de público

El local estaba lleno de clientes. Tras la supuesta amenaza y la discusión, los delincuentes y la trabajadora huyeron y se metieron en un ascensor del centro comercial anexo al club. El dueño del establecimiento reaccionó rápidamente y cortó el suministro eléctrico de la finca, de manera que logró que los presuntos delincuentes quedaran atrapados en el interior del elevador hasta que llegó la policía nacional. Agentes de la brigada de seguridad ciudadana de la comisaría del distrito norte de Alicante interrogaron al propietario del local, que explicó el altercado. Minutos después, los agentes lograron desbloquear el ascensor y detuvieron a los dos hombres y a la mujer que estaban atrapados en el mismo. La policía detuvo a los tres y les intervino una pistola semiautomática de nueve milímetros. Además, detuvo a otra persona como posible cómplice, ya que esperaba en un vehículo de alta gama en la puerta del local, con el motor en marcha, preparado para facilitar la huida de los delincuentes.

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Los cuatro arrestados, todos de nacionalidad rumana, han pasado a disposición judicial acusados de los presuntos delitos de amenazas y tenencia ilícita de armas. Tres de ellos tienen antecedentes penales, según la policía.

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