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Una entrevista bastará para elegir a los inspectores educativos

UGT denuncia que la plantilla afín al PP suma ya el 45%

El sindicato UGT denunció ayer que una entrevista personal bastará a la Consejería de Educación para seleccionar a los futuros inspectores educativos accidentales. Y criticó la política del Consell emprendida hace 13 años para contar con inspectores afines al PP, una política que ya ha logrado, según sus datos, que el 45% de la plantilla actual esté compuesta por funcionarios de confianza del Consell. Según las cifras de UGT, en una plantilla actual de 150 inspectores, las dos últimas oposiciones han servido para consolidar 79 puestos de trabajo, y "todos ellos, menos ocho o nueve", o eran "inspectores accidentales, o ex altos cargos de la consejería o miembros de la Administración local". En total unos 70 funcionarios: el 45% de la plantilla. Los inspectores accidentales son funcionarios que ocupaban, hasta ahora a dedo, una plaza de forma provisional. Tras años de ejercer han contado con ventaja en las oposiciones.

Una forma de actuación que, según denunció ayer UGT, el Consell quiere seguir practicando puesto que el borrador del nuevo concurso de méritos para seleccionar a los inspectores accidentales "contraviene toda la legislación de la función pública valenciana". Gerardo Fernández Asenjo, secretario de Relaciones Institucionales de FETE-UGT PV, explicó que de los 40 puntos totales del concurso de méritos la entrevista personal asigna 30, mientras que la experiencia profesional solo puede otorgar, como máximo, otros 10. Guillermo Martí, secretario general de FETE-UGT, lo resumió así: "Tres cuartas partes de los puntos recaen sobre la entrevista, que son méritos subjetivos". Por todo ello, en la próxima reunión de la mesa sectorial de Educación, el día 15, UGT exigirá la modificación del concurso.

El director general de Personal de la consejería, David Barelles, replicó que las oposiciones de 2001 y 2007 fueron "totalmente transparentes", que UGT ya perdió sus recursos interpuestos en la de 2001 y que en 2007 el resultado "previsiblemente será el mismo". Barelles añadió que el borrador pretende un concurso de méritos "más objetivo y más transparente".

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