Un éxito de modelo productivo (sanitario)

La cara visible de la economía valenciana es la de las colas de parados, los edificios a medio construir, las regulaciones de empleo o las viviendas vacías a la espera de comprador. Pero existe también otra imagen. Hay empresas que han sabido adaptarse a las necedidades del mercado, que han apostado por la innovación y que han cimentado proyectos sólidos a prueba de crisis. El sector de la medicina privada valenciana es un ejemplo de proyectos de éxito que han trascendido las fronteras autonómicas. Estas son algunas de las principales firmas que configuran lo que podría denominarse como el cluster sanitario valenciano.

NISA La referencia en los hospitales privados

El IVI está presente en América; Baviera en Austria, Holanda y Alemania

Nisa está a punto de inaugurar su octavo hospital en España

Con siete centros en funcionamiento (ocho el mes que viene con la apertura de una unidad de daño cerebral en Elche) Nuevas Inversiones en Servicios, SA (Nisa) se ha convertido el grupo hospitalario privado de referencia en la Comunidad Valenciana y uno de los más importantes de toda España. El punto de partida de esta red fue la Clínica Virgen del Consuelo de Valencia, impulsada en 1970 por un grupo de profesionales ante la "falta de camas privadas y buscando ofrecer un servicio de calidad", como indica el director general de la compañía, Joaquín Montenegro.

La gran expansión de la compañía llegó en la década de 1990. Un año después, la empresa adquirió el hospital San Juan de Dios (el actual Valencia al Mar). En 1993, se inauguró el 9 de Octubre y en 1998 se incorporó el hospital Aguas Vivas. Más tarde llegaría el salto fuera de la provincia de Valencia con el hospital Rey Don Jaime de Castellón (2003), y de la Comunidad Valenciana con los hospitales Sevilla-Aljarafe y Pardo de Aravaca de Madrid en 2007. Entre los planes del grupo está abrir un nuevo hospital en Valencia, y otro fuera de la Comunidad Valenciana "en cinco o 10 años", apunta Montenegro.

RIBERA SALUD Dos cajas de ahorro en la gestión sanitaria

En 13 años, Ribera Salud se ha consolidado como el principal operador privado de la sanidad pública española, lo que no es poco para una empresa con una composición muy particular (Bancaixa y la CAM al 50%) y que nació casi por accidente. La Generalitat necesitaba apoyo financiero para poner en marcha su gran proyecto sanitario: un hospital público de gestión privada. De esta forma, en 1997 se creó Ribera Salud, una sociedad que se integró en el accionariado de la unión de empresas gestoras del hospital controlada por Adeslas.

La fórmula se repitió en Torrevieja con Asisa; en Dénia con DKV; en Manises con Sanitas, y en Elche otra vez con Asisa. Sin embargo, Ribera Salud se ha desprendido hace años de la naturaleza instrumental que tuvo y se ha independizado. El negocio de Ribera Salud ya no son sólo este tipo de hospitales (también está en el Hospital de Torrejón en Madrid), sino todo lo que tenga que ver con la gestión privada de segmentos de la sanidad pública. Por eso entró como accionista de Erescanner -la adjudicataria del diagnóstico de resonancia magnética de la sanidad pública- o en la gestión del laboratorio clínico del hospital Infanta Sofía de San Sebastián de los Reyes, que atiende a seis centros públicos. Todo ello, sin perder de vista posibles oportunidades de negocio en el extranjero, sea en Brasil o en Portugal.

IVI Innovación en reproducción asistida

El Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) se ha convertido en dos décadas en una referencia mundial en el ámbito de la reproducción asistida. Quizás este grupo sea uno de los mejores ejemplos de la apuesta por un mercado emergente en el momento justo combinada con la innovación aplicada a la medicina. Gracias a su potente departamento de investigación, el IVI se ha convertido en un grupo líder no sólo en porcentaje de éxito de embarazos, sino en complejos tratamientos dirigidos a evitar la transmisión de enfermedades genéticas, lo que le ha permitido situarse en una situación muy ventajosa respecto a sus competidores nacionales y extranjeros. Los números de este grupo de clínicas fundadas por los ginecólogos valencianos José Remohí y Antonio Pellicer hablan por sí mismos. Casi uno de cada 100 niños que nacen en España es gracias al IVI. En 20 años han practicado 170.000 tratamientos, el 20% de ellos a extranjeros, que se han traducido en 50.000 bebés. Cuentan con 20 clínicas repartidas en toda España, Lisboa, Panamá, Santiago de Chile, Estambul, Buenos Aires y Salvador de Bahía.

CORPORACIÓN DERMOESTÉTICA La cirugía estética como bien de consumo

Corporación Dermoestética es una de las principales responsables de la generalización de la cirugía plástica como un bien de consumo más, además de ofrecer todo tipo de tratamientos estéticos. Tras crecer por toda España, inició un proceso de expansión que les llevó a tener una importante presencia en el Reino Unido e Italia. El grupo se deshizo de estas filiales en 2008 y 2009, y también ha paralizado su proyecto de crecimiento por México ante la conyuntura económica actual. Ante la crisis se ha centrado en mantener su presencia en España y Portugal. La compañía tiene 50 clínicas repartidas entre las 17 comunidades autónomas, el 90% de las cuales son centros propios.

BAVIERA La idea de dos hermanos

El origen de este grupo está en en el oftalmólogo valenciano Julio Baviera (director médico), en su hermano Eduardo (consejero delegado) y un grupo de socios que se centraron en la medicina oftalmológica. Tras la salida a bolsa, la familia Baviera controla el 19,8% de las acciones y los médicos fundadores el 11%. En estos momentos, el grupo (con sede en Madrid) tiene 69 clínicas. La mayoría corresponden a la actividad oftalmológica (Clínica Baviera), pero también cuentan con una división de cirugía estética (Clínica Londres) que tiene 13 centros. El grupo está presente en Italia, y Austria, Holanda y Alemania a través de la filial Care Vision.