La oposición insta a Camps a atender el clamor contra la corrupción

Los partidos de la oposición coincidieron ayer en reclamar al presidente de la Generalitat y del PP valenciano, Francisco Camps, que tenga en cuenta a los ciudadanos que el sábado protestaron de forma masiva contra la corrupción en una manifestación en Valencia. Miles de personas clamaron contra los casos de corrupción y pidieron la dimisión de Camps. Pero los populares no parecen dispuestos a tomar nota de ese clamor, al contrario, ayer ningunearon a los participantes.

Así, el vicepresidente económico, Gerardo Camps, afirmó que el Consell no ve con "preocupación" la manifestación del sábado porque acudieron "pocos valencianos" y, en todo caso, "los mismos de siempre, con distinta pancarta". La secretaria de Comunicación del PP valenciano, Sagrario Sánchez, aseguró que la protesta fue "alentada por la extrema izquierda, que ha movilizado a sus bases para manchar la imagen del PP y atacar a sus dirigentes porque no tienen otra alternativa más constructiva para llegar a los ciudadanos". Y desacreditó la manifestación porque algunos asistentes portaban la senyera cuatribarrada, "de la que hacen uso los independentistas para violar nuestras señas de identidad, y pancartas pintadas con los colores republicanos".

Ninet: "La sociedad demanda respuestas y da muestras de ganas de cambio"

Pero la oposición lo ve todo muy distinto. "La sociedad demanda respuestas y da muestras de ganas de cambio", declaró Carmen Ninet, portavoz adjunta socialista en las Cortes. Según Ninet, la "multitudinaria convocatoria ciudadana contra la corrupción" demostró que, "mientras la Generalitat está paralizada, sin dar soluciones a los problemas de los ciudadanos y sólo ocupada en ver a quién culpa el presidente Camps de su responsabilidad en la trama Gürtel, la sociedad sale a la calle y pide soluciones".

Enric Morera, secretario general del Bloc, dijo que la manifestación "demuestra que una buena parte de la sociedad valenciana está harta de un Gobierno que no hace nada, que no atiende sus responsabilidades y que sólo ha pensado en beneficiar a sus amigos".

El portavoz de Els Verds, Giuseppe Grezzi, consideró que la manifestación fue "un mensaje claro de la opinión pública valenciana, que no está dispuesta a escuchar más mentiras y ofensas de unos representantes del pueblo corruptos y aprovechados".