_
_
_
_
_
Reportaje:Elecciones 27M

El peso electoral de la cultura

El PP presenta su programa a intelectuales y artistas mientras el PSPV busca el voto de los músicos

Populares y socialistas contrastaron ayer, casi sin saberlo, sus esfuerzos por atraerse el voto de la cultura. El presidente de la Generalitat y candidato popular, Francisco Camps, optó por la alta cultura. Los candidatos socialistas Joan Ignasi Pla y Carmen Alborch, por la cultura popular.

Camps eligió un marco noble como el reconstruido claustro renacentista del embajador Vich del San Pío V de Valencia. Allí contó con el apoyo del verbo florido y el latín del consejero de Cultura, Alejandro Font de Mora, como mantenedor. Y también con un ramillete de prestigiosos y populares representantes del mundo de la cultura, que tan sólo en la letra A era capaz de incluir desde Alicia Alonso, la reconocida directora del Ballet Nacional de Cuba, hasta Arévalo, el cómico que mejor cuenta chistes de gangosos. Aunque el resto del abecedario seguía con nombres como Blanca Marsillach, Pepe Sancho, Ripollés, Jaime Siles, Horacio Silva, Manuel Galduf, Fernanda Zabala, María Abradelo, Eduard Mira, etc.

Camps promete una consejería singular y Pla más subvenciones a las escuelas de música
Más información
La "discreta" campaña de los zaplanistas
Pla quiere regular por ley los tiempos de espera en sanidad

Camps prometió dos cosas al selecto auditorio. Primera, que si vuelve a gobernar la Consejería de Cultura tendrá entidad propia, con más presupuesto y posibilidad de conveniar con el resto de Administraciones. Segundo, que respetará la independencia de los creadores porque lo importante es el resultado artístico.

Porque de glosar los méritos de la gestión del Consell ya se encargó Font de Mora, que esa misma mañana había anunciado en Castellón que el PP impulsará la futura Ciudad de las Lenguas y conectará las bibliotecas de la provincia a Internet, informa María Fabra. Así que por la tarde comparó la gestión cultural durante el mandato de Camps con el esplendor renacentista del claustro. Eso sí, con mucho cuidado de no despertar algunas de las bichas dormidas del programa cultural de 2003 como la Ciudad Eufórica, la Universidad del Espectáculo, la creación de la Big Band de la Comunidad Valenciana o el Mediterranean Fringe Festival, por poner unos casos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Font de Mora apabulló con cifras estadísticas (de espectadores, presupuestos y donaciones artísticas a la Administración) y prefirió ignorar a la oposición: "Habrá quien aquí hable de despilfarro pero estos mármoles no se merecen estos pesares".

Y mientras, ¿los candidatos socialistas qué hicieron? Pues dejaron de lado la puesta en escena, que no debe ser lo suyo, y se fueron a los despachos y a las salas de ensayo a convencer a la tropa.

Pla, acompañado de Andrés Perelló -candidato y ex alcalde de Buñol que sabe lo que es mediar entre los feos y los litros- y Vicent Escrig, acudió a la Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana y se comprometió a crear un mapa de las escuelas de música y a mejorar la subvención pública a las bandas, que son el principal movimiento asociativo de los valencianos. Los socialistas intentaron aprovechar un terreno abonado por el malestar existente entre las bandas de música, cuya federación asegura que las ayudas de la Generalitat han disminuido un 27% en nueve años; mientras crecía el número de escuelas y alumnos y el gasto en profesorado (11 veces más) y las subvenciones eran incapaces de seguir el ritmo.

La candidata socialista a la alcaldía, Carmen Alborch, también visitó a los músicos de la Orquesta de Valencia en el Palau de la Música y allí les prometió que trabajará para que recuperen su ilusión y su protagonismo.

En definitiva, cultura popular versus alta cultura. Esa que hizo exclamar a Font de Mora, dirigiéndose a Camps: "Si el embajador Vich viviera, el día 27 te votaría".

Camps, arriba, con Ripollés ayer. Abajo, Alborch con músicos de la Orquesta de Valencia.
Camps, arriba, con Ripollés ayer. Abajo, Alborch con músicos de la Orquesta de Valencia.SANTIAGO CARREGUÍ

PROMESAS CULTURALES

- El PP promete montar una compañía estable de teatro de la Generalitat

- También defiende la creación de un Centro Sorolla en Valencia

- Potenciar el Monasterio de El Puig como centro espiritual y cultural

- Organizar actividades de perfeccionamiento instrumental de orquestas

- Impulsar el Palau de les Arts

- Nuevas exposiciones de la Luz de las Imágenes

- Comprar el Teatro Principal de Valencia a la Diputación

- Conmemorar el 700 aniversario del nacimiento de Jaume I

- El PSPV promete crear un mapa de las escuelas de música y dotarlas más

- Los socialistas también quieren reorganizar el Palau de les Arts

- Potenciar la música y los músicos valencianos

- Crear una emisora de Ràdio 9 dedicada a la música clásica

- Lograr un pacto por la cultura y las artes escénicas

- Establecer un plan de fomento de la lectura

- Reorientar el Consorcio de Museos

- Apoyar a los diseñadores valencianos

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_