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Tres pueblos del Maestrat generan la basura que puede admitir Xixona

49 municipios enviarán todos sus residuos a partir de marzoAsegura que pidió una reunión con la Generalitat por estar mal informado

La planta de tratamiento de residuos de Xixona se construyó con una capacidad máxima para tratar 150.000 toneladas de residuos al año. Antes de que el alcalde del municipio, Ferran Verdú, llegara al Gobierno local, la instalación se sobreexplotó hasta llegar a tratar 250.000 toneladas. El objetivo del alcalde fue rebajar la cantidad de basura hasta el máximo de capacidad técnica, meta que logró el último año, cuando la planta registró la entrada de unas 100.000 toneladas. Por ello, desde que se conoció la intención de la empresa pública Vaersa de trasladar la basura del norte de Castellón hasta Xixona, Verdú ha mantenido que solo admitirá 50.000 toneladas, con las que se alcanzará el tope de capacidad de la planta.

Camps afirma que la polémica "va encaminada a solucionarse"

Tanto el consorcio de la zona 1 (que aglutina 49 municipios del norte de Castellón), como el diputado provincial de Medio Ambiente, Vicent Aparici, han limitado la generación de basura de esta área a las 50.000 toneladas que podría admitir Xixona. Sin embargo, el hecho es que solo tres municipios ya generan esa cantidad.

La localidad que más residuos produce es Benicarló, con 25.000 toneladas al año, según admitieron ayer fuentes municipales. A estas, se sumará Vinaròs, que genera 14.000 anuales, según indicaron desde el propio Ayuntamiento, y Peñíscola con 10.500 toneladas al año, tal como señalaron fuentes del Consistorio. Así, los tres municipios suman un total de 49.000 toneladas anuales.

Actualmente Xixona ya está recibiendo la basura de los 20 municipios que hasta principios de enero vertían en el recién clausurado vertedero de Vilafranca. Al tratarse de pequeñas localidades, la generación de residuos, en total, no supera las 5.000 toneladas anuales. El resto de pueblos que conforman la zona 1, cerca de una treintena, confía en que Vaersa cumpla con su compromiso de hacerse cargo de sus basuras. Según los plazos previstos, el traslado de todos los residuos de la zona 1 podría comenzar en marzo, fecha en la que debe estar concluida la planta de transferencia que ya tiene licencia y se está ejecutando en Benicarló. Además de los tres grandes municipios, la zona 1 abarca otros pueblos como Alcalà de Xivert (Alcossebre), Torreblanca u Oropesa, que engordarán por decenas de miles el total que genera esta área.La penúltima crisis de la basura de Xixona se caracteriza por la falta de claridad en los datos. Y es que desde que Consell autorizó al consorcio de la zona 1 (norte de Castellón) a enviar sus residuos provisionalmente a la planta alicantina mientras construye sus propias infraestructuras de tratamiento, oficialmente no se sabe qué cantidad supondrá este acuerdo. El dato más claro es que la planta de Xixona tiene una capacidad máxima para recibir 150.000 toneladas al año y en 2010 la instalación absorbió alrededor de 100.000 toneladas, lo que permite aceptar 50.000 toneladas extra.

El presidente del Consejo Regulador del Turrón de Jijona y Alicante, Enrique Garrigós, aseguró ayer que desconocía esta disponibilidad de la planta cuando reclamó en diciembre una cumbre de empresarios con el Consell sobre la basura. "La pedí porque me habían informado de que se nos estaba llenando de basura". También dice que desconocía que hay un convenio firmado por el Ayuntamiento de Xixona por el que recibe una compensación económica por recibir 150.000 toneladas de basura al año en su término municipal.

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Garrigós se siente molesto porque considera que ha sido dejado "en evidencia, ya que la planta tiene capacidad para más". "Hay que ser solidario y si en este momento hace falta eso y a ti te faltan 50.000 toneladas...". El también presidente de la Cámara de Comercio de Alicante agregó que lo importante es que la basura no supere la capacidad de la planta.

En este último punto coincide con la postura del Ayuntamiento de Xixona, que dirige el socialista Ferran Verdú. El Consistorio no se opone a que entre basura a la planta de Xixona, que gestiona la empresa pública Vaersa, sino a que en la instalación entren más toneladas de las que tiene capacidad de admitir. Ayer, Verdú añadió que hace tiempo que en la junta directiva del Consejo Regulador del Turrón de Jijona y Alicante, en el que está representado también el Ayuntamiento, traslada a los turroneros la preocupación por una eventual instalación en la localidad de una planta incineradora y también sobre la falta de inversión que precisa la planta si quiere adaptarse su capacidad para recibir más residuos. El Consistorio, por otra parte, ultima el recurso que presentará ante el TSJ contra la llegada de la basura del consorcio de la zona 1.

Mientras, ayer el presidente del Consell, Francisco Camps, declaró escuetamente en Alicante al ser preguntado por la polémica que rodea la llegada de la basura en Xixona que esta "va encaminada a solucionarse".

Pero los ánimos están lejos de calmarse en Xixona. El colectivo Xixona Neta ha repartido estos días unas pegatinas por el municipio contra la llegada de más basura. También ha convocado a los vecinos a través de Facebook para que cuelguen en sus balcones una bolsa de basura con la palabra "no" en señal de protesta. El colectivo se preguntaba ayer por qué Garrigós hizo presión en Navidad y ahora guarda silencio.

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