El puerto de Valencia roza al de Algeciras en tráfico de mercancías
Las estadísticas apuntan que en 2010 lo superará y será el primero de España
En el año 2005, con un movimiento de 40,9 millones de toneladas de mercancías, el puerto de Valencia era el tercero de España. Tenía por delante al de Barcelona (43,8) y al de Algeciras (61,6), el principal puerto español en tráfico de mercancías y con un fuerte peso, además, en el de viajeros por los transbordadores que cubren el paso del Estrecho. Sin embargo, un acelerado impulso espoleaba la actividad del muelle de Valencia, que, sólo un año después, con 47,3 millones de toneladas, rebasó al de Barcelona (46,4) y se colocó tras el de Algeciras (63,3).
En los años sucesivos, incluso con el enfriamiento de la crisis, el puerto de Valencia no solo ha consolidado la segunda posición sino que ha seguido creciendo en una proporción superior a la de Algeciras y, por supuesto, a la de Barcelona. En ese sentido, cerró 2008 con 59,5 millones de toneladas frente a las 69,6 de Algeciras y las 50,5 de Barcelona. La apuesta por el contenedor y la rápida transformación en un puerto de tránsito o transbordo (movimiento de mercancías de barco a barco) ha permitido que Valencia haya continuado acercándose a Algeciras y distanciándose de Barcelona. En ese sentido, Valencia ha alcanzado en 2009 el liderazgo en el tráfico de contenedores del sistema portuario español.
Una de cada tres toneladas que llega a España entra por El Grau
Valencia ha alcanzado en 2009 el liderazgo español en contenedores
En términos absolutos, hasta agosto (Puertos del Estado no ha difundido todavía los datos de septiembre de todos los puertos), el tráfico total (graneles y contenedores) manipulado por Valencia ha sido de 37,8 millones de toneladas, rozando los 41,9 de Algeciras. El dato afianza una proporción que, de extrapolar las series disponibles a los próximos meses, apunta a que superará al muelle andaluz en el primer trimestre 2010. La disminución general de la actividad portuaria también contribuye a esta progresión, ya que el descenso de Algeciras hasta agosto supone un -10,3%, frente al -5,8% de Valencia (el más leve de España) y el -21,9% de Barcelona. De hecho, incluso la disminución de los graneles sólidos en Valencia (41,95%) por la crisis de la construcción ha retardado el cruce con Algeciras.
Los datos obtenidos por el puerto de Valencia en septiembre refuerzan esa tendencia, aunque el tráfico total de mercancías ha caído un 5,51% (la media española hasta agosto fue de -16,6% y en ese mes Valencia registró -5,80). Incluso manteniendo estable el tráfico de contenedores por primera vez en dos décadas, la mercancía transportada en contenedor experimentó un incremento del 2,83%.
El éxito de Valencia radica en haberse convertido en el puerto de Madrid y la razón de sus resultados se sustenta en la especialización de las distintas plataformas: contenedores a Valencia y graneles y automóviles a Sagunto. Asimismo, ha sido decisiva la apuesta por el transbordo, que durante los primeros nueve meses de año representa el 50,19% de su actividad en el tráfico de contenedores. De los 28,11 millones de toneladas de mercancía movida en contenedor hasta agosto, 17,94 fueron de barco a barco, lo que supone que una de cada tres toneladas llegadas a España fue gestionada por el puerto de Valencia. Asimismo, este verano ha alcanzado el 45% del tráfico de contenedores relacionados con la importación y la exportación en el total de los puertos de España.
Para afianzar su posición y para mantener su competitividad en el futuro, ahora que es uno de los principales muelles del Mediterráneo y la principal puerta de entrada de Asia en Europa, el puerto de Valencia está reactualizando su Plan Estratégico 2001-2015. Asimismo, para ajustar su gestión a la ralentización de la actividad derivada de la crisis global la Autoridad Portuaria de Valencia ha decidido frenar las "inversiones no productivas", como la inversión en suelo logístico en Parc Sagunt o en la Zona de Actividades Logísticas (ZAL).
¿Fusión con Castellón?
La vibrante evolución del puerto de Valencia, que incluye las plataformas de Sagunto y Gandia, no ha contagiado al segundo y tercer puertos de la Comunidad Valenciana, Castellón y Alicante. En el período entre 2005 y 2008, el puerto de Castellón ha mantenido su estabilidad alrededor de los 13 millones de toneladas, con una caída del 19,97% en 2009. La principal producción de su entorno, la cerámica, utiliza el puerto de Valencia para sus exportaciones, siguiendo las ventajas derivadas de la importancia del tamaño en unidades operativas de las plataformas.
Las cifras de Alicante son peores. El desplome del tráfico de mercancías supone el 23,17% (también el año pasado alcanzó esa cota) y es mucho mayor que en otros puertos, lo que apunta hacia un problema de competitividad. Con esos parámetros, incluso algunos expertos, como el especialista en telemática aplicada al transporte Gregorio Martín, consideran carente de sentido hacer apuestas para Alicante como plataforma logística.
Del mismo modo, frente a la posición del Consell, que impulsa siete unidades logísticas en la Comunidad Valenciana, Martín apuesta por la concentración y considera muy oportuno abrir un debate sobre una posible unificación entre el puerto de Valencia y el de Castellón, igual que se ha planteado la de los muelles de Barcelona y Tarragona en su vocación por el control de la fachada mediterránea. Desde su punto de vista, esa fusión incrementaría su capacidad estratégica intensificando la especialización de unas plataformas que contarían con interconexión ferroviaria en el corredor mediterráneo.
Otras fuentes, sin embargo, recelan de esa opción, cuyas posibilidades deberían ser analizadas tras desglosar los tráficos y las sinergias y que, en cualquier caso, no se podría producir sin el mutuo acuerdo de las dos autoridades portuarias. La Autoridad Portuaria de Valencia no se ha planteado por ahora la posibilidad.
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