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ELECCIONES MUNICIPALES Y AUTONÓMICAS

Los socialistas claman por el esfuerzo, la dignidad y las reformas

Lleno absoluto en el acto central de campaña en Valencia

Los socialistas valencianos protagonizaron ayer una demostración de amor propio. Exhibieron su capacidad de movilización en momentos difíciles y el orgullo de unas bases que no siempre han encontrado reflejo en sus dirigentes y, pese a lo que en esos momentos proclamaba en Alicante su bestia negra, el candidato del PP, Francisco Camps, quien se permitió asegurar que "estaba vacía de personas, de ideas, de ilusiones y de confianza", la plaza de toros de Valencia registró un lleno absoluto en el mitin central de campaña. Un mitin celebrado bajo un sol de justicia (hubo alguna lipotimia) en el que miles de personas (15.000 según el PSPV-PSOE, en un recinto en el que caben sentados 11.000 espectadores) jalearon un mensaje de dignidad, expresaron su enfado con Canal 9 (gritaron "fuera , fuera" por su manipulación informativa pero, invitados a hacerlo por los oradores, aplaudieron a sus profesionales), y reivindicaron a esa parte de la sociedad valenciana indignada por la corrupción y la deriva autoritaria de los populares.

Gritos de "libertad de expresión" frente a Canal 9 entre los asistentes

"Nos han educado como gente libre que respeta a las familias de las personas", dijo el candidato a la Generalitat, Jorge Alarte, tras agradecer al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, su presencia. "Mis padres están aquí y lo primero que me enseñaron fue convivencia y respeto. Por eso hoy pido dignidad para las personas y para las familias. Quiero defender la dignidad de Zapatero y también la de su abuelo". La referencia a las declaraciones de Camps afeando al líder socialista la falta de cariño de su abuelo, fusilado en la Guerra Civil, levantó una ovación. "La dignidad por la que el abuelo de Zapatero perdió su vida, ni Camps ni los suyos la han conocido nunca", añadió.

Los llamamientos al esfuerzo, la honradez y las reformas jalonaron los discursos de Alarte, de Zapatero y del candidato a la alcaldía de Valencia, Joan Calabuig, que tuvo un recuerdo para los afectados por el terremoto en Lorca y citó al presidente del Gobierno para definir el talante que propugna: "No hay que darles caña, hay que darles ejemplo".

Un dirigente del PSPV-PSOE definía muy gráficamente la catarsis que supuso el acto de ayer: "Aunque no hubiese sido Zapatero, sino el mismísimo Hannibal Lecter, toda esta gente habría venido a dejar claro que, por adversas que sean las encuestas, estamos en pie" ."Se puede tener personas honradas gobernando", dijo Joan Calabuig, en la alusión más explícita a la corrupción de todo el acto de los socialistas. "Yo voy en una lista sin ningún imputado, de gente con las manos limpias".

Por su parte, Jorge Alarte retó al presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, que el martes protagonizará un mitin en la misma plaza de toros de Valencia. "Quiero dejarles aquí un mensaje a Rajoy y a Camps, para el próximo martes 17, para cuando vengan aquí y se suba Rajoy con toda su cara, que tiene mucha. Si se sube aquí y nos dice que Camps es un hombre honorable y decente, eso significará que Rajoy le tiene miedo a Camps, porque sabe mucho, o que es igual de indigno que él".

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El segundo "recado" que Alarte le dejó a Rajoy resumía la parte mollar de su discurso, el de Calabuig y el del mismo Zapatero (quien, como Alarte, dedicó un elogio al portavoz parlamentario del PSPV-PSOE, Ángel Luna, presente en la plaza, por la persecución que ha sufrido del PP al denunciar la corrupción). "Aquí no hacen más que decirnos que ellos con Rajoy sabrían qué políticas hacer para que hubiera menos desempleo", dijo el candidato socialista. "Pero les digo aquí que sí saben cuáles son las políticas que hay que hacer: las de Camps... Y aquí hay cinco puntos más de paro. Por eso con Rajoy tendríamos más paro todavía. Ese sería Rajoy".

El drama del paro fue abordado sin paliativos. Zapatero llegó a afirmar que se siente responsable de todos y cada uno de quienes han perdido el empleo, como contraste con unos dirigentes de la derecha, a quienes comparó con la extrema derecha de los Auténticos Finlandeses, que eluden siempre cualquier responsabilidad y que han evitado apoyar al Gobierno porque ponen por encima sus intereses de partido de los de España. El presidente del Gobierno argumentó con cifras su gestión en relación con la Comunidad Valenciana y citó la llegada del AVE, los 228 millones de euros del Plan E en Valencia, los 1.400 millones en el conjunto de municipios valencianos, y una reforma de la financiación autonómica que permite a la Generalitat, según dijo, acercarse a la media española. Zapatero defendió su gestión ante la crisis, cuyos orígenes atribuyó al urbanismo desbocado y al recurso al endeudamiento, y afirmó: "Las reformas de hoy son la prosperidad de mañana".

El de las reformas fue también el tema subyacente al discurso de Alarte, que reiteró el valor del esfuerzo para dar un futuro a los jóvenes. La reforma de la formación profesional, un nuevo modelo económico y el saneamiento de la Generalitat para atajar el despilfarro y reorientar las inversiones hacia los servicios sociales fueron sus argumentos. Y una llamada a la movilización electoral. "Es tiempo de no resignarse, es tiempo de ser valientes", dijo Alarte sobre la cita del 22 de mayo. Para apoyar su proclama recordó la respuesta que los jóvenes dieron al intento del PP de mentir sobre los atentados del 11 de marzo de 2004, que propició la victoria de Zapatero.

La apelación al orgullo de sus militantes y simpatizantes tuvo eco en un auditorio que coreó gritos de "libertad de expresión" tras abuchear a Canal 9 y se dio una dosis de autoestima en un ambiente festivo, amenizado por más de 250 músicos de bandas valencianas y un grupo que interpretó la canción de Deacon Blue Dignity en la versión que los socialistas han convertido en himno de campaña.

La dirección de Ràdio Televisió Valenciana hizo público tras el mitin un comunicado de repulsa "ante los insultos sufridos por sus equipos", que consideró "un ataque inédito e inaceptable contra los profesionales de los medios de comunicación de la Comunidad Valenciana". Por su parte, la Unió de Periodistes Valencians defendió a los trabajadores de RTVV, pero exigió que se acabe con la manipulación informativa. Tras "rechazar conductas como las sufridas por el equipo de la televisión pública valenciana", acusó de la situación de Canal 9 a sus responsables y directivos "así como a los dirigentes políticos que la impulsan y amparan". "Valoramos la defensa de los trabajadores de RTVV que han hecho el secretario general del PSPV-PSOE y el candidato a la alcaldía de Valencia", dijo la Unió, que animó a los trabajadores de RTVV "a hacer uso de la claúsula de conciencia" para defender su profesionalidad ante la manipulación.

Jorge Alarte, José Luis Rodríguez Zapatero y Joan Calabuig levantan el pulgar en el centro de la plaza de toros de Valencia.
Jorge Alarte, José Luis Rodríguez Zapatero y Joan Calabuig levantan el pulgar en el centro de la plaza de toros de Valencia.CARLES FRANCESC

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