Los valores de la República

Manuel Azaña admitió en uno de sus discursos que venir a Alicante y hablar de republicanismo era "como echar agua al mar". No hacía falta, la provincia era el baluarte de la República, cuna de dirigentes políticos. "Fue un periodo importante de modernización y democratización", destaca el historiador Francisco Moreno, que junto a Juan Martínez Leal y Mónica Moreno, han comisionado la exposición Recuerdo de una esperanza. La Segunda República en Alicante (1931-1936), que se inauguró ayer en el Museo de la Universidad de Alicante.

La muestra, compuesta por 18 paneles divulgativos y varias vitrinas con libros y objetos personales, se nutre de fondos procedentes de diversos archivos de la provincia de Alicante. Josep Bevià, del Archivo de la Democracia de la Universidad, explica que la idea surgió tras la donación de material por parte de los familiares del primer alcalde de Alicante de este periodo, Lorenzo Carbonell. Gracias a eso se puede contemplar su bastón de mando, varias fotografías, libros y otros objetos personales.

Bevià: "El franquismo quiso decapitar la República"

Moreno: "Fue un periodo de modernización y democracia"

La exposición ofrece una visión "cronológica y objetiva", según Bevià, de ese periodo. Los antecedentes de la Segunda República, los avances que supuso para las mujeres, los conflictos religiosos e incluso cómo la República se encargó de hacer republicanos.

Entre el material que se exhibe figuran algunas curiosidades, por ejemplo, una baraja republicana en la que los reyes son los tres presidentes de esos años y Joaquín Costa, y el palo de espadas es sustituido por una espiga, en señal de paz. También se ve a una bellea del foc con su banda republicana, varios libros escolares o ejemplares de la constitución. En la Segunda República Alicante experimentó cambios modernizadores importantes: se abrieron dos institutos nuevos en Elche y Orihuela, que luego el franquismo cerró "por innecesarios", según Moreno. Y Muguruza, por ejemplo, planificó el desarrollo urbano con vistas al turismo de la playa de San Juan.

"El franquismo intentó meter en la cabeza de la gente que ese gran periodo de avances sociales acabó en una Guerra Civil", se lamenta el historiador, Moreno. "Franco quiso decapitar la República", agrega Bevià. Con esta exposición se pretende ahora poner en valor la cara amable de esos cinco años de logros para las mujeres, que pudieron votar o divorciarse, y para los miles de niños que aprendieron a leer y a escribir en las 21.000 escuelas que se construyeron.

Y como broche final a la conmemoración del 80 aniversario de las elecciones del 12 de abril de 1931, anoche en la sede de la Universidad de Alicante se proyectó la película Ciudadano Negrín, cuyo director Sigfrid Monleón dialogó con el público.