Anxo Quintana insta a Touriño y Feijóo a confirmar ya si van a los debates en TVG
Al portavoz nacional del BNG, Anxo Quintana, no le sirven las disculpas del presidente del PP gallego, Alberto Núñez Feijóo, sobre "el escándalo de manipulación del voto emigrante", en alusión al documento de la Diputación de Pontevedra entregado en México por Feijóo. Ayer, en Allariz, Quintana se mostró rotundo: "Está bien y yo se lo agradezco, pero los ciudadanos no quieren disculpas, quieren soluciones". Quintana también instó a Feijóo y al líder socialista, Emilio Pérez Touriño, a confirmar ya si participarán en los debates de TVG.
Reiteró el vicepresidente de la Xunta a PP y PSOE -cuya candidata por Ourense y ministra, Elena Espinosa, anunció un viaje a Argentina- su propuesta de "tres medidas muy claras para llevar desde Galicia al Parlamento del Estado en los seis primeros meses de la legislatura". Se trata de crear una circunscripción electoral gallega, depurar el censo de los residentes ausentes y regular las campañas electorales en el extranjero.
El líder del BNG cree que éste es el momento más adecuado para que todas las fuerzas políticas hagan "un esfuerzo ineludible de claridad y transparencia democrática". Y, aprovechando la fecha del día, 9 de febrero, a un mes exacto de las elecciones, vaticinó: "Habrá un aumento muy considerable del BNG y un descenso igual de considerable del PP, lo que será un buen resultado no sólo para Galicia, sino para la limpieza democrática".
Esta es, precisamente, la "solución" que Quintana exige a Feijóo en lugar de las disculpas. Que aproveche, junto con el PSOE, este "ofrecimiento firme de transparencia democrática, ejemplo para España, y le diga a los ciudadanos que no harán falta más disculpas", señaló.
La demanda de claridad y transparencia sobre la que giró el discurso de Quintana en Allariz se hizo extensiva a los debates televisivos. Tras reiterar que acudirá a los dos a los que ha sido convocado, exigió a los líderes de PP y PSOE que le confirmen este fin de semana, "alto y claro, sin disculpas ni concesiones", si ellos también piensan asistir, mientras les advierte: "Esto no es una guerra, ni siquiera un reto; se trata sólo de principios democráticos".
