Baiona deroga la ordenanza sobre ruidos "por simplificar"
La oposición lo considera una "amnistía encubierta"
El pleno municipal de Baiona derogó ayer la ordenanza sobre ruidos "por simplificar la normativa existente" en la materia, según el alcalde, Jesús Vázquez Almuíña, que presentó personalmente la propuesta. La derogación de la ordenanza no crea ningún vacío legal, ya que será de aplicación la normativa autonómica (singularmente la Lei do Ruido de 2007 y los reglamentos que la desarrollan), según explicó el regidor amparándose en los informes de los técnicos municipales.
La ordenanza estaba vigente desde 2004 y reproducía en gran medida los términos de la que rige en Santiago por el tratamiento que ambas daban al casco histórico. "Era muy compleja y nada práctica", aduce Vázquez Almuíña. "Entraba en contradición en muchos apartados con las normas promulgadas posteriormente y los vecinos interesados en abrir locales se estaban encontrando con muchas dificultades para entender cuál era la normativa de aplicación. Para que la gente no se líe, nos ha parecido que lo más práctico era empezar de cero y hacer una ordenanza más estable", añadió.
Los grupos socialista y nacionalista votaron en contra de la derogación tras señalar que, si la ordenanza estaba desfasada, lo pertinente era adaptarla a las normas superiores. A su juicio, la derogación significa una "amnistía encubierta" para los expedientes sancionadores actualmente abiertos, en los que tiene un especial protagonismo Ezequiel Simóns, presidente de la asociación de empresarios y padre de la concejal de Urbanismo. El alcalde asegura que el procedimiento sancionador no se altera ni el Ayuntamiento renuncia a sancionar según las normas autonómicas.
