_
_
_
_
_

Caballero defiende a Povisa y premia a la asociación que defiende la sanidad pública

El alcalde de Vigo, Abel Caballero, se erigió ayer en paladín de los intereses del Hospital Povisa, centro privado que presta cobertura en el área sanitaria de Vigo a 139.000 cartillas de la Seguridad Social gracias a un concierto singular, y hoy premiará como viguesa distinguida a la Asociación pola Defensa da Sanidade Pública, que siempre ha denunciado la singularidad de dicho concierto por la discriminación que introduce en el sistema público de atención sanitaria.

Caballero sale a la palestra al hilo de la confrontación abierta la semana pasada entre el hospital privado vigués y el Sergas. Para el alcalde está claro: "Están mintiendo, calumniando y atacando a una empresa. Y todo, porque Povisa defiende su planteamiento, mientras el Gobierno gallego trata de rebajar el dinero a la sanidad viguesa", declaró a Faro de Vigo, tras considerar "imprescindible" que la Consellería de Sanidade firme "de forma inmediata" la renovación del concierto.

El regidor vigués no duda de que el presidente de la Xunta,Alberto Núñez Feijóo "amenaza la sanidad de esta ciudad", atribuyéndole que Vigo soporte "la peor calidad sanitaria" de Galicia. "En A Coruña hace grandes inversiones y en Vigo, nada en la pública y amenaza a la privada", dice en otro momento, para concluir que el Sergas somete a Povisa a "un acoso intolerable".

El periódico vigués también dedicó ayer mismo un largo editorial a defender al Hospital Povisa, "una de las empresas privadas más emblemáticas y reputadas de Galicia", y despacha como "un error", sin mayores comentarios, que su actual problema con el Sergas "se mezcle con otro tipo de consideraciones, por ejemplo el ancestral debate entre la sanidad pública y privada", dice, como si esa no fuera, como ninguna otra, causa angular del actual conflicto.

Es, de hecho, lo que viene denunciando desde hace años la Asociación pola Defensa da Sanidade Pública, que hoy mismo será premiada por el pleno municipal como viguesa distinguida. Esta asociación no pone en tela de juicio la capacitación del personal y de la tecnología sanitaria del hospital privado, cosa que nadie hace, sino la singularidad de su concierto con el sistema público, que ha distorsionado en el área sanitaria de Vigo la organización de las prestaciones comunes. Así, por ejemplo, en la misma área sanitaria, el tiempo de espera quirúrgica en los hospitales públicos fue en 2010 de 67 días y en Povisa, de 141.

La asociación distinguida se ha pronunciado en numerosas ocasiones -es su razón de ser- contra las privatizaciones del nuevo hospital de Vigo. "El conflicto de Povisa ilustra en sí mismo los desfases que puede trasladar a la asistencia pública su choque con las aspiraciones legítimas de una empresa privada a obtener beneficios", reitera Manuel Martín, su portavoz.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Santiago Domínguez, teniente de alcalde y candidato del BNG, defiende en el mismo diario vigués la incorporación futura de los profesionales de Povisa a la red pública, y Corina Porro, candidata del PP, prefirió no pronunciarse. A Caballero siempre le cabrá, una vez consumada la distinción, condenar a la asociación al ostracismo como viene haciendo con la de la Memoria do 36, también viguesa distinguida y a la que ni escucha ni recibe desde que la premió.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_