Educación obliga a cambiar de centro a más de 2.000 alumnos

Siete Institutos de Enseñanza Secundaria (IES) de Galicia pasarán el próximo curso a ser Centros Integrados de Formación Profesional (CIFP). Es, en palabras de la Consellería de Educación "un paso más en la estrategia de impulso de la FP". También supone el cambio de centro en unos meses de más de 2.000 alumnos y de 210 profesores, que hoy por hoy no saben dónde impartirán clase en septiembre. Los sindicatos rechazan este cambio por precipitado y no consensuado con la comunidad educativa.

La consellería asegura que los alumnos tienen garantizadas plazas en centros que distan, como mucho, 400 metros de los institutos donde cursarán sus estudios hasta final de mes. Sobre los profesores todavía no hay una solución definida, aunque quienes tienen plazas consolidadas irán en principio a IES de la misma ciudad en la que estaban. Los centros afectados son los de Coroso (Ribeira), Ferrolterra (Ferrol), Paseo das Pontes (A Coruña) y Fene en la provincia de A Coruña; el politécnico de Lugo, el Portovello de Ourense, el A Xunqueira en Pontevedra y el Manuel Antonio de Vigo.

La Xunta asegura que el traslado será a centros a menos de 400 metros

Según los cálculos del sindicato CIG Ensino, se suprimen 46 unidades de ESO, es decir, 138 profesores y más de 1.380 puestos escolares. Según estas cuentas, se suprimirán también más de 24 unidades de bachillerato, "que se puede traducir en más de 72 profesores y más de 720 escolares". A estos 210 docentes que cambian de centro y más de 2.000 alumnos, se suma, según CIG, las supresiones de las reservas de matrícula, que podrían superar los 700 alumnos inscritos. "Es muy grave que la consellería haga el anuncio para la prensa antes de llevar el tema a la mesa sectorial", denuncia el sindicato.

Comisiones Obreras asegura que este cambio va a producir "un perjuicio al alumnado y una pérdida de derechos para el profesorado, cuyo puesto de trabajo será suprimido o se verá desplazado el 1 de septiembre". "Además, no van a tener la oportunidad de participar en el concurso de traslados hasta el próximo curso escolar y se verán imposibilitados a obtener uno definitivo hasta el siguiente", continúa CC OO.

También se suma a las críticas el sindicato independiente STEG. Piensa que afecta a alumnos: "Al no tomarse la medida con la suficiente antelación, no se previó que se les obliga a ir a un centro que no escogieron. Cosas como estas son en las que las familias tienen interés en escoger haciendo uso de su libertad". Y cree que les perjudica a los profesores: "Supone la pérdida de destino de cientos de docentes que, de haberse hecho con tiempo, podrían haber concursado y pensar la mejor manera de solucionar esta difícil situación laboral". STEG planteará en la mesa sectorial de mañana a Educación que retire el plan para poder planificarlo con más tiempo.

La consellería lee la situación con otro enfoque. Es, según dijo el conselleiro el pasado martes, "una nueva hoja de ruta para la FP gallega, que se fundamenta en un incremento de la oferta y del número de plazas, en la extensión de la FP a distancia en las cuatro provincias gallegas, de una nueva oferta con ciclos más adaptados a las necesidades de los sectores socioproductivos de Galicia".

En opinión del portavoz de Educación del Grupo Parlamentario Socialista, Guillermo Meijón, con esta medida 187 plazas serán amortizadas, en una "una nueva ofensiva de la Xunta contra el sistema educativo público". En total, se reducirán, según sus cálculos, 1.800 plazas, "muchas de las cuales serán cubiertas con interinos".

El parlamentario asegura que las oposiciones únicamente servirán para reponer el 30% de las jubilaciones ordinarias: aproximadamente 200 de 700. A ellas se suman otras 600 del reciente concurso de traslados junto con casi un millar de jubilaciones anticipadas, dado que se trata del "último año" que se pueden solicitar.