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Hallada la chaqueta que llevaba Laura Alonso el domingo

Un helicóptero, perros y ocho agentes a caballo se suman al rastreo en Toén

La búsqueda de Laura Alonso Pérez, la joven de 19 años desaparecida el domingo, continuó ayer por cuarto día en el municipio orensano de Toén, donde se halló una nueva pista, una chaqueta negra a dos kilómetros del lugar en el que se encontró su teléfono móvil a principios de semana. La familia identificó la prenda y dijo que era la que llevaba la joven la noche que desapareció. Aunque la Guardia Civil admite la hipótesis de una posible muerte violenta, el coordinador del dispositivo de búsqueda, el teniente Javier Martín, advirtió: "No podemos perder las esperanzas". Unas 80 personas centraron ayer el rastreo en el entorno del colegio público y el psiquiátrico de Toén, donde apareció el teléfono. Hoy se trasladará al Miño

Según el alcalde, la familia ha solicitado el apoyo de un psicólogo

El hallazgo de la chaqueta, la segunda que aparece en la zona desde que se peinan las riberas del Miño en busca de Laura Alonso, ha dado nuevas esperanzas al equipo de rastreo, compuesto por agentes de la Guardia Civil, el Seprona y Protección Civil de Barbadás y Toén, además de vecinos, familiares y amigos de la chica. A las 80 personas del dispositivo, ayer se sumaron a las labores un helicóptero, ocho caballos del Escuadrón de Caballería de la Guardia Civil y varios perros de la Agrupación de Protección Civil de A Estrada.

Mientras tanto, varias zodiacs pilotadas por voluntarios del municipio de Castrelo recorren el río Miño entre el pueblo de la joven, Xestosa, y Alongos, el lugar en el que se encontró el coche. Esta última localidad está situada en la dirección contraria a la que la joven debía tomar para regresar a casa después de salir de noche con sus amigos.

El miércoles trascendió el hallazgo de una chaqueta de color negro, quemada, pero los expertos concluyeron ayer que no pertenecía a Laura Alonso. No obstante, en la localidad de Moreiras, a dos kilómetros del lugar donde apareció el teléfono móvil, una joven se topó con otra chaqueta, intacta, en el suelo, y aunque en principio pensó en llevársela a casa para usarla ella misma, finalmente decidió entregarla al enterarse de las pesquisas que se estaban llevando a cabo. Ayer, familiares de la desaparecida identificaron la prenda como la chaqueta que llevaba Laura, junto con un vestido azul, la noche en que marchó para no volver.

Ayer, a última hora de la tarde, la Guardia Civil ofreció una rueda de prensa para advertir de que, por ahora, la Policía Científica no ha confirmado que la segunda chaqueta pertenezca a Laura Alonso. "De momento, ni confirmamos ni desmentimos", dijo un representante del instituto armado, a pesar de que los familiares consideran que sí se trata de la prenda de la muchacha. En la misma comparecencia, los agentes anunciaron que hoy la búsqueda se centrará de forma especial en el río, a la altura de donde aparecieron las pistas.

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El alcalde de Toén, Amancio Cid, confirmó que la familia de Laura Alonso ya ha solicitado el apoyo de un psicólogo, sobre todo para la madre, que es la más afectada. Tanto responsables de Protección Civil como de la Guardia Civil calificaron la operación de "muy difícil", sobre todo "por la maleza". De hecho, según el sargento Javier Martín, "se han rastreado las mismas zonas varias veces" sin resultado. "A medida que se tengan más datos", dijo, "se irá ampliando la zona de búsqueda", que actualmente es de nueve kilómetros cuadrados.

La desaparición de esta joven se produjo el domingo después de que saliera con sus amigos en la localidad de A Valenzá. Las tres de la madrugada fue el último momento en el que hubo noticias de Laura. Fue a través de un mensaje a su novio, de 21 años, diciéndole que había llegado ya a casa. Una hora más tarde, el joven recibió una llamada desde el teléfono de la chica, pero no la atendió porque ya se había quedado dormido.

Lo más turbio de este caso ha sido el hallazgo de un segundo teléfono móvil de Laura en su casa, en el que había mensajes recientes y amenazantes de su ex novio, un hombre de 32 años con el que al parecer mantuvo una relación complicada.Tanto su actual pareja como su ex novio prestaron declaración ante la Guardia Civil el lunes.

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