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ING lleva dos años negociando los terrenos de la mayor operación urbanística de Vigo

Lagares Ingeniería intermedia en la compra de 1,5 millones de metros cuadrados en Liñeiriños

Lagares Ingeniería SL, empresa que colabora con la comunidad de montes de Cabral, realiza desde hace dos años los contactos para la compra de 1,5 millones de metros cuadrados en la zona de Liñeiriños para la promotora ING Real Estate Development Spain Holding, S.A. La inmobiliaria holandesa es la misma que firmó un convenio secreto para entregar 1,5 millones de euros a la Alcaldía de Vigo, tras obtener permiso para edificar una urbanización y un centro comercial en la Gran Vía, una operación que acaba de ser declarada ilegal por el Tribunal Supremo.

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ING Real Estate prevé invertir 114 millones en comprar los terrenos de Liñeiriños, una superficie situada junto al aeropuerto de Vigo y que el ayuntamiento pretende recalificar como edificable. Lagares Ingeniería SL, empresa que colabora desde hace años con la comunidad de montes de Cabral, está ofertando entre 54 y 60 euros el metro cuadrado. ING ha calculado que ganará en esta operación 73,5 millones de euros.

"¿No trae los planos?", bromea el primer vecino al que el periodista pregunta por la ubicación de Liñeiriños, en la parroquia de Santa Marina del barrio vigués de Cabral. Los planos son los que va levantando Lagares Ingeniería. Las parcelas suman 1.463.638 metros cuadrados. En sus cálculos del año pasado, la inmobiliaria holandesa contaba con pagar hasta 72 euros el metro cuadrado y por un total de 113.911.884 euros. Una cifra demasiado cuadrada para los cálculos de cada vecino.

Claro que también hay viviendas por medio, y éstas requieren tarifa especial. "A ése le ofrecieron 40 millones [de pesetas] por la casa y 20 por el terreno, pero depende, porque acaso dentro de dos o cinco años ya no le compensa pagarse casa en otro sitio", explican.

Todos han asumido en cualquier caso que el plan general los expropiará. Los más impacientes, o necesitados, fueron hace unos días a manifestarse en Santiago, a pedir que la Xunta licencie de una vez el plan. A otros la espera no les inquieta, a su tiempo se verá si hay que renegociar. Para explicar cómo están las cosas apuntan a Luis Rodríguez, un militante de la vieja guardia socialista viguesa, hoy presidente de la asociación de vecinos y de la comunidad de montes.

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"Le digo que nadie ha vendido. Nadie ha cobrado un céntimo, ni como anticipo ni como nada; si no, yo lo sabría", afirma rotundamente Luis Rodríguez Pérez. El presidente vecinal y comunero no admitía, hace una semana, que existiera la menor negociación. El concejal de Urbanismo de Vigo, José Manuel Figueroa, afirma que "el Ayuntamiento no está haciendo nada en Liñeiriños; las negociaciones las lleva directamente la inmobiliaria con la comunidad de montes". En la red interna de ING circuló el año pasado un documento finalmente aprobado en Holanda, en relación con el negocio de Liñeiriños, que afirma que, del total de suelo a comprar, "500.000 metros cuadrados ya han sido asegurados con el mayor propietario al precio mencionado" [72 euros el metro].

"Eso es un engaño", reitera el presidente de la comunidad de montes, el principal propietario de la operación. "Nadie ha contactado conmigo, así que nada puedo decir", declara Luis Rodríguez, aunque finalmente admite que él mismo ha puesto en contacto a los propietarios con Lagares Ingeniería a fin de hacer las mediciones de sus propiedades y, consecuentemente, derivar su tasación.

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