Industria tramita tres parques eólicos que cercarán el monte Pindo

Es una de las cimas de Galicia más cercada por los aerogeneradores y las turbinas accionadas por el viento. Ahora, los proyectos para crear otros tres parques eólicos amenazan con ahondar aún más en el destroce paulatino de las riquezas arqueológica y paisajística del monte Pindo. Ubicado en el municipio de Carnota (A Coruña), este macizo alberga numerosos restos prehistóricos, como petroglifos y mámoas, así como hábitats prioritarios y humedales. La pretensión de la empresa Eurovento de desarrollar ahora, con la creación de tres nuevos parques eólicos en el entorno del Pindo, toda la potencia concedida hace una década por la Xunta de Manuel Fraga supone una amenaza seria, según los ecologistas de Adega, al patrimonio histórico y natural.

Las torres podrán alcanzar una altura superior a 100 metros

La Xunta rechazó proteger la zona y declararla Parque Natural

La Consellería de Industria ya dio su visto bueno a esos nuevos proyectos en las inmediaciones de uno de los montes más emblemáticos de la provincia de A Coruña. Eurovento inicia ahora los trámites para obtener el imprescindible informe favorable de impacto ambiental, obligatorio en este caso dado que las nuevas instalaciones de turbinas y aerogeneradores estarán a menos de dos kilómetros de parques eólicos ya existentes.

La organización ecologista acaba de presentar alegaciones contra estos nuevos proyectos por su nefasta repercusión sobre un macizo de que ya bate récords en número de "aerogeneradores, pistas, conducciones eléctricas y estaciones de transformación". El monte Pindo ya está cercado por 13 parques eólicos, algunos con molinos de cien metros de alto, repartidos por los municipios de Carnota, Muros, Dumbría y Mazaricos.

Uno de los nuevos proyectos pretende situarse a menos de un kilómeto de la devesa de Anllares, considerado el bosque atlántico más occidental de Europa. Los otros dos, en suroeste del Pindo, se erigirán sobre el monte y la playa más extensa de Galicia, la de Carnota, "justo encima", advierte Adega, de la zona de ampliación del Lugar de Interés Comunitario (LIC) Carnota-Monte Pindo. Las futuras torretas de molinos eólicos, además de las pistas de acceso que requieren, afectarán de lleno a tres humedales catalogados advierte Adega.

"Con razón la Xunta rechazó declarar el Pindo Parque Natural", acusan los ecologistas. Sospechan que la demora del Gobierno gallego en ampliar la Red Natura y las zonas de especial protección, como lo es Carnota-Monte Pindo, también obedece a la pretensión de primero autorizar más instalaciones de fuerte impacto ambiental como son los parques eólicos, minicentrales de aprovechamiento eléctrico o canteras.

Adega, en sus alegaciones contra estos tres proyectos, destaca que hay alternativas para conciliar los derechos empresariales de Eurovento, que pretende desarrollar toda la potencia que le autorizaron a producir en su momento, y la conservación del patrimonio natural. "Bastaría con asignar la potencia de esos nuevos parques eólicos, un total de 33 megawatios, a otros que ya tiene construidos la empresa". Esta última podría substituir alguna de sus ya antiguos aerogeneradores, con potencias limitadas a 0,6 megawatios, por otros de tres megawatios. "Se podría así ocupar menos terreno y reducir la densidad de molinos, un factor clave en el impacto paisajístico y sus efectos sobre la avifauna", recalca Adega.

Eurovento, en su documentación, reconoce que los tres nuevos parques tendrán impactos ambientales y sobre todo paisajístico en el Monte Pindo, pero alega en su favor que serán menores que otras instalaciones muchos más grandes que ya existente en ese enclave.