Medio Ambiente contabiliza unos 200 vertederos incontrolados

El año pasado se eliminaron en Galicia 56 vertederos incontrolados, pero quedan aún, según el inventario de la Consellería de Medio Ambiente, unos doscientos. Sin embargo, el recuento de la Xunta "rápidamente se queda obsoleto porque, mientras se van regenerando unos puntos, van apareciendo otros". El director general de Calidade e Avaliación Ambiental, Justo de Benito, explicó ayer en comisión parlamentaria que todavía "hay una proliferación" de puntos de vertido incontrolado. A partir de la puesta en marcha de Sogama a principios de los años noventa, se sellaron y regeneraron los espacios que ocupaban más de 300 vertederos municipales, que se adhirieron a la sociedad pública. A pesar de esta "drástica" reducción, la lucha contra estos basureros ilegales se mantiene.

Con fondos de la Unión Europea, el bipartito mantuvo la recuperación de los terrenos y el Gobierno de Alberto Núñez Feijóo activó el pasado año un subprograma específico. A lo largo de 2009, la Xunta destinó 207.000 euros para el sellado de 56 vertederos ilegales, de los que se retiraron 2.200 metros cúbicos de residuos no peligrosos y 35 de peligrosos. Las actuaciones de la Administración, como "no pueden dar una respuesta inmediata" a todos los vertidos, se centran en resolver con mayor celeridad los que son más graves. El director general no habló de cifras sobre las sanciones que debieran acarrear estos basureros incontrolados y sí se mostró contrario a imponer multas: "Tengo poca fe en la eficacia de las sanciones, son necesarias pero también el último recurso", indicó. Las intervenciones de la Xunta comienzan por la recogida y separación de residuos, su traslado a un gestor autorizado y una posterior regeneración ambiental del terreno. De Benito consideró que en muchas ocasiones es "incomprensible" que se sigan reproduciendo los vertederos porque se dispone de un servicio municipal, del que depende la competencia de residuos. Sin embargo, admitió que en otros casos hay una responsabilidad de las Administraciones local y autonómica porque que no se da una respuesta adecuada a todas las necesidades de depósito de residuos, dijo.

El director general se mostró "optimista" pese a la proliferación de puntos de vertido incontrolados debido a la próxima aprobación del plan de residuos urbanos y la construcción de una segunda planta de incineración en el Sur de Galicia. "Pienso que será fundamental", recalcó. A pesar de todo, De Benito se comprometió a mantener abierto el programa para la erradicación de las decenas de basureros ilegales.