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Medio millar de personas exigen en Teixeiro la libertad del patrón de Ferrol

Los mariscadores esperan que la Xunta responda hoy a su oferta de diálogo sobre Reganosa

Tres días y 89 kilómetros después, los mariscadores de Ferrol alcanzaron ayer su meta en la cárcel de Teixeiro, tras una marcha "pacífica y solidaria" que los llevó a cruzar la provincia para exigir la libertad del patrón mayor de la cofradía. Unas 500 personas reclamaron a gritos la liberación de Bernardo Bastida, en prisión por tratar de impedir la entrada de un nuevo gasero a Reganosa. Los mariscadores esperan hoy un gesto de diálogo de la Xunta, aunque el conselleiro de Innovación, Fernando Blanco, ha insistido en que la planta es "estratégica" y no supone "ningún impacto".

Paso a paso, y dicen que con mucho esfuerzo, los mariscadores ferrolanos lograron ayer completar su particular vía crucis llegando a las puertas de la prisión provincial de Teixeiro (Curtis), donde permanece encarcelado por orden judicial el patrón mayor de la Cofradía de Ferrol, Bernardo Bastida, desde el pasado 30 de mayo en prisión provisional y sin fianza por impedir la llegada de un buque metanero a Reganosa.

Ampollas, pies doloridos e incluso algunos kilos menos es el balance casi optimista que hacían ayer los mariscadores de Ferrol y otros miembros del Comité Cidadán de Emerxencia por la ría después de tres días de intensa marcha, a ratos, pasada por agua.

Ni la lluvia ni las empinadas cuestas de Coirós consiguieron aplacar el buen humor de los mariscadores, que ayer por la tarde regresaban a casa motorizados -en autobuses y coches particulares-, exhaustos pero orgullosos de su gesta y con la satisfacción del deber cumplido. "Creemos que Bastida nos ha oído. Nos han escuchado en todos los módulos" aseguró Jaime Gabarri, portavoz del pósito ferrolano.

En un comunicado leído sobre las 15 horas ante la prisión, los portavoces del Comité Cidadán recordaron que el conflicto que mantienen con Reganosa por la ubicación de la planta de gas de Mugardos en el interior de la ría no se puede reducir a una cuestión "económica", y consideran que es un "problema social" que afecta a toda la comarca. "Bastida no ha cometido delitos. Está en la cárcel por defender los intereses de los mariscadores y la vida de los habitantes de la ría" manifestaron.

En tres días, los caminantes han cruzado la provincia y atravesado nueve municipios distintos: Ferrol, Fene, Cabanas, Pontedeume, Miño, Paderne, Betanzos y Coirós hasta llegar a Curtis, en el límite con Lugo, donde se encuentra el penal de Teixeiro. Allí se encontraron con muchos simpatizantes que se acercaron en coche para participar en el acto final. En total, se juntaron unas 500 personas, pero los organizadores aseguran que fueron bastantes más.

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Cuentan que no todos los que partieron el viernes desde el puerto de Ferrol pudieron completar el camino, pero que otros muchos se les unieron a su paso por los distintos municipios. "Normalmente voy en coche hasta para ir al bar de enfrente y ahora tengo los pies sangrando, pero no importa, porque tenemos la razón", aseguraba un mariscador ferrolano.

Los últimos seis kilómetros fueron sin duda los más concurridos, e incluso políticos como Yolanda Díaz, coordinadora de IU en Galicia, y responsables de CC OO, se unieron a la marcha en su tramo final. "Un diez para todos", dijo Gabarri, "para los municipios que nos acogieron, para quienes nos animaron y acompañaron, e incluso un diez para la Guardia Civil, que son los teóricos enemigos. Se han portado muy bien". Hoy a primera hora de la mañana volverán a embarcarse con la marea como todos los lunes "para ganarnos el pan", pero confían en que el eco de su protesta "pacífica" haya llegado también hasta los despachos de San Caetano y Reganosa. Ofrecen calma y diálogo para negociar una salida a este conflicto que los enfrenta a la compañía gasística desde principios de mayo.

Aunque, en realidad, tal y como recordaba ayer Mabel Rivera, los afectados "llevan seis años en lucha". La actriz y su marido, Enrique Banet, participaron en la marcha (el primer día, hasta Pontedeume, y ayer, en su tramo final) para fotografiar y grabar algunas escenas. La pareja quiere incluirlas, seguramente resumidas en un par de minutos, en la segunda parte de su primer documental sobre el conflicto de Reganosa (O salario do silencio). Este nuevo proyecto ya tiene título. Se llamará O espírito de Galicia, releyendo, con intención, el nombre del primer gasero que intentó llegar a Reganosa. El Galicia Spirit.

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