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El Parlamento exige al Gobierno central la competencia de Tráfico

Quintana asegura que la demanda es el "mayor ejercicio de autogobierno"

Ni votos en contra, ni abstenciones: 71 diputados en los escaños y otras tantas luces verdes en el panel de votaciones del hemiciclo. PP, PSdeG y Bloque recuperaron ayer la unanimidad en el Parlamento gallego para reivindicar que la gestión del tráfico se acometa desde Galicia. La fórmula la planteó el vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, en su intervención durante el debate sobre el Estado de la Autonomía y ayer la Cámara autonómica inicio el proceso formal.

"No nos creemos el no va más en reducir accidentes", proclama Rego

El Parlamento aprobó una proposición de ley que será enviada al Congreso y en la que se solicita la modificación de una ley orgánica que permita transferir la competencia del control del tráfico en virtud del artículo 150.2 de la Constitución, que prevé la amplicación del techo competencial de las comunidades autónomas. El texto no será enviado a la Cámara Baja hasta la próxima legislatura y, por tratarse de una modificación de una ley orgánica, deberá ser aprobado por mayoría absoluta.

Los tres grupos representados en el Parlamento gallego defendieron ayer con argumentos similares la necesidad de adecuar la planificación de la seguridad vial a la realidad diferenciada de Galicia y a sus peculiaridades: orografía, dispersión de población y climatología adversa. Si bien, los distintos partidos discreparon sobre los resultados que el ejercicio de la competencia podría deparar en el futuro sobre la reducción de la siniestralidad.

El portavoz parlamentario del BNG, Carlos Aymerich, citó como ejemplo las siete muertes en las carreteras durante la operación salida de Navidad para concluir que "Madrid no está dando respuesta a las necesidades de Galicia" y argumentó que la transferencia contribuirá a "atajar la sangría de las carreteras" que está sufriendo la comunidad.

Aymerich recordó que la competencia de tráfico ya está contemplada en la Lei de Policía que prevé la creación de un cuerpo autonómico y abogó por aprovechar la experiencia de "compatriotas integrados en la Guardia Civil" en la futura policía gallega y acometer "el paulatino replegamiento de las Fuerzas de Seguridad del Estado". El diputado socialista, Ismael Rego, aseguró: "No nos creemos el no va más en reducir accidentes". Su grupo, dijo, pide que la competencia sea de la Xunta para ofrecer un tratamiento adecuado desde Galicia de acuerdo con sus características especiales.

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Durante su intervención, el representante del PP, Manuel Ruiz Rivas, reivindicó "la coherencia del PP que sirvió para garantizar la unanimidad en el Parlamento", y aseguró que esa era la verdadera "cooperación inteligente", refiriéndose al término que acostumbra a utilizar el vicepresidente de la Xunta para definir la relación de los gobiernos de Santiago y Madrid. Al término de la ronda de intervenciones de los grupos el número dos del Gobierno gallego, Anxo Quintana, solicitó la palabra para "agradecer la unanimidad del Parlamento" que defendió como "el mayor ejercicio de autogobierno".

El vicepresidente elogió el esfuerzo de la Consellería de Política Territorial para mejorar las carreteras, "pese a carecer de competencias", y aseguró que esa implicación es la que "le da fuerza a la Xunta para autorresponsabilizarse de que el Tráfico se puede gestionar mejor desde aquí". Quintana explicó además que al aprobarse la proposición de ley en un período transitorio -será el Gobierno saliente de las urnas en marzo el que tramite la solicitud del Parlamento gallego- la iniciativa nace con un plus de legitimidad porque no es una medida contra ningún gobierno. "Actuamos en clave gallega marcando ritmos políticos propios y pensando en Galicia", concluyó.

"Horizonte razonable"

Una vez finalizada la sesión, también el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, convocó a los medios de comunicación para valorar el acuerdo que "abre el camino real de esta competencia en un horizonte razonable". Touriño aseguró que se trata de un hecho "extraordinariamente relevante para Galicia" y defendió el compromiso de la Xunta en la prevención de la siniestralidad con instrumentos como el plan de seguridad vial, la creación del Comisionado del Gobierno para prevenir la siniestralidad y la Ley de Policía Autonómica.

El jefe del Ejecutivo calificó estas iniciativas como "la mejor garantía para que los ciudadanos sepan que Galicia aspira legítimamente y está preparada para ejercerla, pese a no estar recogida en el Estatuto de Autonomía".

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