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La caja gastó el 30% de los fondos de Obra Social en ladrillo

María Fernández

Las cajas de ahorro gallegas tenían un particular -aunque no exclusivo- modo de entender la Obra Social. En el lustro anterior a la fusión, el 30% de los fondos dedicados a labores culturales y asistenciales fueron a parar a la compra y rehabilitación de más y más edificios. El resultado está a la vista: Novacaixagalicia se ha quedado con un patrimonio de 96 inmuebles y al menos 15 de ellos se han cerrado porque no se le ha dado ningún uso.

El dato lo dio ayer Manuel Galdo, director de Política Financiera de la Consellería de Facenda, que intervino en una comisión parlamentaria para explicar, a instancias de los socialistas, el futuro de la labor asistencial de la caja ahora que ha perdido todo su negocio y mantiene solo el 6,8% del capital del banco que creó. "El FROB [fondo de rescate del Banco de España] fue el comprador y a la vez el valorador", criticó, para explicar por qué los 1.714 millones que la caja aportaba como capital fundacional del banco se convirtieron por arte de magia en 181 millones. "El binomio precio-valor no resultó coincidente".

Desde la oposición, María José Caride apeló varias veces al técnico para que explicase cuál ha sido el motivo para que el único de los exdirectivos que ha devuelto parte de su indemnización, Javier García de Paredes, lo haya hecho al banco, y no a la caja de ahorros. "Hay un mandato de este Parlamento para que esos fondos reviertan en la Obra Social", le recordó Caride. Pero ese acuerdo es puro papel mojado. "Lamento que no tengamos competencias sobre los bancos. Ustedes sí las tenían sobre las cajas y no las ejercieron", vino a decir Galdo.

Renuncia de Gayoso

En Vigo, a la misma hora que se celebraba en Santiago la sesión parlamentaria, Julio Fernández Gayoso y Mauro Varela, copresidentes de Novacaixagalicia, presentaban su carta de renuncia a estar en el comité ejecutivo del banco presidido por José María Castellano. En el próximo consejo serán nombrados sus sustitutos. Fuentes de la caja apuntaban ayer a que el Banco de España tiene mucho interés en que sean personas con un determinado perfil técnico.

La Xunta prepara ya la ley para que Novacaixagalicia se convierta en una fundación de carácter especial. Esa norma permitirá que no esté sometida a las mismas obligaciones contables que tiene hoy como caja.

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Sobre la firma

María Fernández
Redactora del diario EL PAÍS desde 2008. Ha trabajado en la delegación de Galicia, en Nacional y actualmente en la sección de Economía, dentro del suplemento NEGOCIOS. Ha sido durante cinco años profesora de narrativas digitales del Máster que imparte el periódico en colaboración con la UAM y tiene formación de posgrado en economía.

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