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La cara positiva de la economía

El convenio marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que entró en vigor el 1994 y que fue desarrollado en el Protocolo de Kioto, establece los límites a las emisiones de un grupo de países para evitar las devastadoras consecuencias de un gradual incremento de las temperaturas por efecto de la contaminación. España se comprometió, a partir de febrero de 2005, a reducir sus emisiones un 5% como media anual durante el periodo 2008-2012. La primera fase de aplicación del régimen, de 2005 a 2007, fue una especie de ensayo "destinado a adquirir experiencia", según el Ministerio de Medio Ambiente. En esos años las industrias contaminaron más de lo permitido en Galicia. Concretamente, en 2005 el exceso fue de 2,7 millones de toneladas para una emisión de 17,3 millones y un año después, la asignación se superó en casi tres millones de toneladas tras la liberación de 16,5 millones de gases.

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Las emisiones de CO2 caen un 40% y cumplen con Kioto por primera vez

2008 iba a ser la prueba de fuego y no pocas organizaciones ecologistas se temían lo peor. Pero llegó la crisis, y tras lustros de intensa contaminación al hilo del boom económico, las cosas se han moderado. El objetivo ahora es que esas mismas fábricas que por primera vez se han ajustado, en conjunto, a lo que les permite el protocolo, sigan haciéndolo y no tengan que pagar para contaminar.

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