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Reportaje:

"La cultura de la falta de esfuerzo está matando el gallego"

La filóloga Goretti Sanmartín revisa los tópicos sobre el idioma

El debate acerca de la presunta existencia de un conflicto lingüístico en Galicia es el protagonista anunciado de la XXVI Semana Galega de Filosofía, desde que se hizo público que la educación era el tema de la presente edición. En medio del cruce -que no diálogo- de discursos que mezclan política y criterios económicos con áreas sensibles como la identidad cultural y la libertad, emergen voces críticas que proponen un nuevo modelo de defensa del gallego, como la profesora de la Universidade da Coruña, Goretti Sanmartín.

"El momento es malo y va a ser absolutamente contrario a algunos avances, pero podemos aprovechar la crisis del sistema para cambiarlo", indica la filóloga y responsable del departamento de Normalización Lingüística de la institución coruñesa. Sanmartín ha forjado su optimismo desmontando tópicos. La investigadora observa que al bipartito le faltó hacer "pedagogía" acerca del polémico decreto de la enseñanza en gallego y que "falló la explicación". También señala la "falta de memoria política de quienes no recordaron que la base del decreto estaba consensuada por todos los partidos con representación parlamentaria" y el papel de algunos medios de comunicación a los que "sólo les interesaba crear crispación".

"El gallego hay que defenderlo porque es el sistema en que nos construimos"

La profesora Sanmartín opina que ha llegado el momento de actuar como ciudadanos en lugar de ceder toda capacidad de acción a las instituciones. De este modo, apuesta por unir el gallego a otras causas, como el feminismo y el ecologismo, en el marco de un pensamiento y favorable a la pluralidad y diversidad: "No es que tengamos que defenderlo porque sea a nosa lingua o una herramienta de comunicación, porque en ese caso sería más útil hablar inglés, sino porque el gallego es el sistema en el que nos construimos".

La autora del ensayo Nos camiños do entusiasmo: calidade da lingua e planificación (Xerais, 2009) introduce el concepto de seguridad como pieza clave para la planificación lingüística. "Hay que dejar de dedicar tiempo y recursos económicos a los monolingües en español y atender las necesidades de los fluctuantes entre los dos idiomas y los monolingües en gallego". Las carencias de los dos últimos grupos son, a su juicio, subsanables si se aumentan las competencias expresivas de los hablantes. Sanmartín confía en que este discurso conecte con la gente joven y aleje del gallego el estigma del coloquialismo. Aunque advierte que no hay fórmulas mágicas, apuesta por el pensamiento y la lectura, antes que hundir en la historia las raíces del problema: "Ni Franco ni los Séculos Escuros, lo que ahora está matando el gallego es esta cultura rápida y poco reflexiva, de falta de esfuerzo que está en crisis. Por eso es el momento de reforzarnos con argumentos".

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