El curso universitario arranca con la financiación en el aire
Feijóo insta a las universidades gallegas a tomar ejemplo de las cajas
A pocas semanas de concretar una nueva financiación para las universidades, con los rectores buscando el acuerdo más ventajoso para sus instituciones, Alberto Núñez Feijóo les pidió ayer, en la inauguración del curso, que tomen ejemplo de la fusión de las cajas de ahorros: "Soy testigo de que en esta decisión trascendental influyeron muchas personas y organizaciones. No ignoro que la generosidad fue decisiva para eliminar los obstáculos que se ponían en el camino de la unidad".
El próximo lunes habrá una reunión entre la Consellería de Educación y los responsables de economía de las tres universidades gallegas para seguir acercando posturas y criterios de financiación, aunque de momento sin cifras sobre la mesa. Sin embargo, en la Universidade da Coruña ya sospechan que el plan irá contra sus intereses. Su rector, José María Barja, pidió el pasado fin de semana que "no se perpetúen" las diferencias entre los tres centros.
"La generosidad fue decisiva para eliminar obstáculos", dice el presidente
En la inauguración oficial del curso, en la sala noble del Pazo de Fonseca de Santiago y rodeado de togas y birretes de colores, el rector de Santiago, Juan Casares Long, hizo hincapié en la necesidad de que la Xunta "priorice el próximo plan de financiación, y el apoyo a la actividad y desarrollo de las universidades para garantizarles un futuro de más bienestar con las generaciones futuras".
Casares Long, que por el turno rotatorio entre las tres universidades fue ayer el responsable de inaugurar el curso junto a Feijóo, fue especialmente explícito sobre el asunto económico al final de su discurso: "Al comienzo de la consolidación de un nuevo modelo de enseñanza [en referencia al plan Bolonia], sin que en ningún momento las administraciones públicas valorasen el esfuerzo económico que supone el paso que estamos dando las universidades, cuando los recursos disponibles para las tareas de investigación, en forma de recursos humanos y proyectos se reducen y las infraestructuras de apoyo a la investigación sólo reciben recursos en forma de anticipos reintegrables (préstamos blandos) es imperativo que la sociedad gallega, a través de sus representantes, asuma el compromiso con el plan de financiación".
Tras oír estas reivindicaciones, Feijóo hizo el llamamiento a la unidad comparándolo con el esfuerzo que han hecho las cajas de ahorros. "Palabras como fusión, convergencia, cooperación, diálogo o acuerdo forman parte de nuestro vocabulario cotidiano. Galicia es una buena materia para los que quieran entender cómo se levanta un país".
Para tranquilizar a los rectores, aseguró que a pesar de la crisis, la educación y la enseñanza universitaria en particular están entre las grandes prioridades de la Xunta. "Ni el Gobierno gallego quiere, ni la sociedad gallega toleraría que hiciéramos de la universidad una de las víctimas de la crisis. Sería esa la mejor manera de lastrar nuestra recuperación. En un momento en el que los recursos son más limitados que nunca, tengo la convicción de que debemos apoyarnos en la riqueza de nuestro capital humano, porque más que nunca, son necesarias las ideas surgidas del estudio y la reflexión", aseguró el presidente.
En la inauguración del curso también hubo tiempo para otros asuntos distintos de la financiación. La lección magistral, a cargo del catedrático de Medicina Legal de la Universidade de Santiago de Compostela Luis Concheiro Carro, fue una reflexión sobre las relaciones entre la medicina y el derecho. Se mostró crítico con la nueva ley del aborto ya que hay "demasiados interrogantes que deberían haber sido respondidos o al menos serenamente analizados antes de promulgar una norma de tanta trascendencia ética, jurídica y social como la vigente".
"¿Cuándo comienza la vida humana? ¿Es el aborto un derecho que asiste a la mujer? ¿Es razonable interrumpir la gestación en determinadas circunstancias? ¿Quién asumirá la responsabilidad por una infrecuente, pero, sin embargo, posible, complicación grave a consecuencia de la intervención abortiva en los casos de menores de edad que no hayan comunicado la decisión a los padres o tutores? ¿Cómo se llevará a cabo la objeción de conciencia?", se preguntó.
También fue crítico con el plan de estudios de medicina y pidió la creación de un máster o un Instituto de Bioética y derecho médico. El rector Casares Long tomó nota de la propuesta, que calificó de "muy razonable".
