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El fiscal pide 14 años para un cura que gestiona residencias de mayores

El ministerio público lo acusa de estafar 600.000 euros a una anciana

La fiscalía orensana considera al sacerdote Benigno Moure, presidente de la Fundación San Rosendo, culpable de un delito de apropiación indebida y estafa, por el que pide 14 años de prisión. Moure, persona muy vinculada al PP, fue denunciado hace tres años por el sobrino de una anciana que ingresó en uno de sus geriátricos, acusado de acceder a las cuentas bancarias de su tía y de transferirse más de 600.000 euros.

Tras dos años de instrucción, la fiscalía considera que Benigno Moure, el cura responsable de la Fundación San Rosendo, se valió de la debilidad mental de una anciana, María Vázquez Covela, para que ésta le autorizase a acceder a las cuentas bancarias de las que ella y su marido -ambos ingresados desde 1998 en el geriátrico Os Gozos- eran titulares. La fundación, de cuyo patronato han formado parte en algún momento destacados miembros del PP, gestiona 28 de los 48 geriátricos de la provincia de Ourense, así como diversas casas de acogida, y su presidente es administrador único de los balnearios de Laias, Arnoia y Lobios.

Según el fiscal, en 1999 Moure transfirió en un día a una cuenta de la Fundación San Rosendo 180.000 euros procedentes de otra cuenta de la anciana y, en la misma semana, otros 270.000 euros. El sacerdote solicitó además la incapacitación legal de la mujer y "posteriormente manipuló a María Vázquez" para que realizara las transferencias "de su cuenta a otra de la fundación, en octubre de 2001". En este año, se apropió de 45.000 euros en una ocasión y de 10.000 en otra. La Fiscalía entiende que el sacerdote convenció a la víctima para que vendiese en escritura privada un piso, varias casas, fincas y viñedos de su propiedad por el precio de 37.000 euros "que nunca ingresó en el patrimonio de María Vázquez".

El fiscal jefe de Ourense, Florentino Delgado, ha solicitado la revisión de varios testimonios recogidos durante la instrucción para investigar si el notario que certificó las ventas cometió también un delito, según señaló a Efe. El sobrino de la anciana, César Vázquez, pide que se impute a Alejo Calatayud como cooperador necesario en los presuntos delitos de apropiación indebida, estafa y falsificación de documento público. Argumenta que en la venta del piso "el notario dice que se hizo en el geriátrico y en presencia del comprador, mientras que el comprador señaló que se hizo en la notaría y que él nunca vio a la mujer".

El denunciante reclama pena de prisión y una indemnización de 900.000 euros a la fundación y considera que el director de la sucursal de Banesto en O Carballiño, José Luis Iglesias Santos, es igualmente culpable de los presuntos delitos de apropiación indebida y estafa, por los que solicita una pena de 25 años.

No es la primera vez que el cura Benigno Moure es denunciado. En 1990, un centenar de trabajadores y el secretario de la CIG en Ourense, Etelvino Blanco, lo demandaron por malos tratos a los residentes de sus geriátricos. Pero en aquella ocasión, el juzgado orensano no sólo no admitió a trámite la denuncia sino que acabó condenado al sindicalista a prisión y al pago de un millón de pesetas que fue pagada por suscripción popular. Moure ha recibido numerosas subvenciones de la Xunta para sus centros.

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